La Unidad Logística 23 conmemoró San Juan Bosco y recibió su nueva bandera, que ha donado la Ciudad y que entregó la esposa del presidente.
Las corbatas que portaba la anterior bandera de la ULOG 23 y, por lo tanto, su “honrosa herencia” lucen ahora en su nueva enseña nacional, que ha sido donada por la Ciudad y que fue entregada ayer por María Dolores Puyas Rivas, madrina de la ceremonia y esposa del presidente del Gobierno local, Juan Vivas, quien a su vez fue nombrado ‘Almojarife de Honor’.
El acto, que coincidió con la celebración del patrón de Especialistas y Logística, San Juan Bosco, tuvo lugar en el Patio de Armas de las Murallas Reales. Allí el teniente coronel Antonio José Muñoz Junguito, jefe de la ULOG 23, señaló en su alocución que esta nueva bandera iniciaba su andadura “heredando las corbatas de la anterior como símbolo de transmisión de una honrosa herencia, pero segura del compromiso del personal que sirve bajo ella, que delante de sus compañeros de armas expresa su decisión de derramar por su honor hasta su última gota de sangre”. Allí, en formación, escuchaban sus palabras, además de efectivos de su propia unidad, militares de la Escuadra de Gastadores, de la Banda de Guerra Mixta de la Comgeceu, Unidad de Música del Batallón del Cuartel General de la Comgeceu, Compañía del 2º Tercio de la Legión, Compañía Grupo de Regulares 54 y Compañía Mixta Comgeceu. El acto, que contó con la presencia de las primeras autoridades civiles, encabezadas por el presidente Juan Vivas y el delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, estuvo presidido por el comandante general, Javier Sancho Sifre, quien pasó revista a la fuerza.
En primer lugar se procedió al nombramiento del presidente Juan Vivas como Almojarife Honorario, una distinción en forma de llave dorada que, según la Comgeceu, se ha instituido para “renococer públicamente a quienes se han distinguido de alguna manera por la intensa colaboración o por el cariño demostrado hacia la Unidad”. Además, en el caso del jefe del Ejecutivo local, sus méritos y acciones vienen exaltados “con el gesto tan entrañable de la donación de la bandera de la Unidad por la Ciudad de Ceuta, iniciativa que como presidente lideró”.
Por su parte, el jefe del Ejecutivo local señaló a la finalización del acto que agradecía a la Comgeceu la distinción en nombre de Ceuta y de todos sus ciudadanos. “Nos ha dado la oportunidad de dar testimonio de algo fundamental: el orgullo de ser españoles”, aseguró Vivas en relación a la entrega de la bandera a la ULOG 23, “no se puede querer a España sin querer a Ceuta y no se puede querer a Ceuta sin querer a España”. Con este acción “hemos podido poner de manifiesto el respeto, el cariño y la admiración del Ejército. Respeto, por la alta misión que tiene encomendada. Cariño, porque forma parte del ADN y de las esencias de Ceuta. Y admiración, por su preparación, capacidades y, sobre todo, por sus cualidades: el espíritu, el sentido del cumplimiento del deber, la abnegación, el sacrificio, el honor, la lealtad, la disciplina y, sobre todo, el amor a España”.
Vivas confesó que se había sentido “emocionado” con el acto de entrega de la bandera a la ULOG 23 porque “renueva aquel otro que, en 1931, se llevó a cabo entregando entonces la Corporación a la Compañía del Mar un estandarte”.
La mili, en Intendencia
“Yo hice la mili en la Jefatura de Intendencia”, rememoró el presidente para referirse a las sensaciones que le habían generado el haber sido nombrado Almojarife de Honor. “Detrás de este nombramiento surgen sentimientos, porque por la edad que uno tiene y siendo de Ceuta, el ambiente, la sirena, las personas y los escenarios del Parque de Artillería y del Parque de Automovilismo forman parte del equipaje entrañable que nunca se olvida”, señaló Vivas. Subrayó que aunque la táctica y la estrategia son importantes, sin la capacidad de moverse y sin apoyo logístico, no se pueden llevar a cabo ni la una ni la otra. Y añadió que confía en no defraudar ante este nombramiento. “Espero y deseo que la llave que hemos recibido sea para mí y para quienes me sucedan una apelación a cuidar del principal título que tiene Ceuta: noble y leal para defender a España, para contribuir hasta donde sea menester el engrandecimiento de España”.
Por su parte, el jefe de la ULOG 23, el teniente coronel Antonio José Muñoz Junguito, en su alocución con motivo de la recepción de la nueva bandera, empezó destacando la relevancia del escenario donde estaba teniendo lugar el acto, la Plaza de Armas de las Murallas Reales. “En este marco, podemos imaginar los momentos de su construcción y vislumbrar algunas de las actividades que dan sentido a nuestra unidad (ULOG 23), como fueron el transportar los materiales necesarios para su construcción y abastecer y sostener al personal que trabajaba en ellas”. También se refirió a otras misiones que a lo largo de su historia las unidades de Ceuta han necesitado y que motivaron la creación de unidades que dieron lugar a la actual ULOG 23.
Después, tras explicar la relevancia que tiene para cada unidad su bandera, señaló que con el acto de ayer se quería “hacer entrega del historial de esta última (la de la Agrupación Logística nº 23) a la nueva bandera de la Unidad Logística nº 23; entrega que conlleva la trasmisisón de la herencia y traslado de la misma a nuestros herederos(...) La misma herencia que carece de sentido separada de nuestro hogar, Ceuta”.
El responsable de la Casa de la Pólvora, que custodiaba la artillería
La distinción de ‘Almojarife Honorario’ rememora la figura del ‘Almojarife de las Municiones’, que era el responsable de la Casa de la Pólvora, encargada de custodiar la artillería y la pólvora y el lugar donde se fabricaban las municiones para la plaza. La denominación ‘Casa de la Pólvora’ no es exclusiva de plazas gobernadas por Portugal sino que han existido en distintas ciudades y pervive aún una de estas instalaciones en Santa Cruz de Tenerife.
Es una institución íntimamente ligada a Ceuta puesto que se puede constatar de forma fehaciente que ya en 1519 Micer Joào Belicer D’Andrade ostentaba el cargo de almojarife de la misma. Con el tiempo, dicha Casa de la Pólvora evolucionó hacia el Parque de Artillería, que a su vez, tras reiteradas transformaciones, se convierte en lo que hoy son los Talleres de Armamento y la Sección de Municionamiento de la Unidad de Logística (ULOG) número 23.