La Gerencia establece este control para asegurar que solo acceden las personas autorizadas. El aparcamiento subterráneo del Hospital Universitario de Loma Colmenar ya tiene activadas las barreras de control de acceso, según confirmó ayer el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Ingesa. Una protección que estaba prevista pero cuya instalación seguía pendiente hasta hace unos días.
De este modo, las plantas -1 y -2 están protegidas frente a posibles intrusiones, tendencia que provocó con anterioridad que la práctica totalidad de las plazas estuvieran cubiertas obligando a los trabajadores a buscar aparcamiento en los alrededores –según críticas de los sindicatos–, además de aplicar así el reglamento al respecto, que garantiza que solo pueden acceder las personas autorizadas, informó Ingesa. Barreras que, por otra parte, están contempladas para instalaciones de estas características. Aún queda pendiente por entrar en funcionamiento la situada en la entrada al Hospital de Día.