El agua es un bien escaso y la pobreza azota un mundo que esta joven ceutí está conociendo a través de la Ruta Quetzal con compañeros que, junto a ella no dejan de aprender cada día de la expedición
Teresa Briz. Expedicionaria Ruta Quetzal BBVA.
Dice que hasta el momento la experiencia está superando todas las expectativas y no poder ducharse a diario, las picaduras de los mosquitos y las caminatas, no le importan al compararlo con todo lo que está aprendiendo. Esta joven ceutí se encuentra en Colombia conociendo de cerca un país que acoge este año a los expedicionarios de la famosa Ruta Quetzal. Teresa es ya una expedicionaria en toda regla.
– ¿ Como accediste a la beca?
-Hice un trabajo de investigación sobre la Constitución de 1812 de Cádiz y después de pasar la selección con un jurado de la Universidad Complutense de Madrid, y de una entrevista personal, fui seleccionada.
- ¿ Que has aprendido hasta ahora de esta experiencia?
-La Ruta Quetzal BBVA me ha permitido conocer distintas culturas en Colombia. A nivel personal he aprendido a valorar cosas a las que antes no daba importancia como el agua corriente, bien que normalmente desperdiciamos en nuestras casas. También estoy conviviendo con otros jóvenes de muchos países de los que estoy conociendo sus diferentes culturas. Algo que me ha sorprendido es ver cómo la gente aquí vive con un nivel de pobreza importante y comparte y te da lo poco que tiene, son muy amables y nos preguntan muy interesados por nuestras vidas.
- ¿En qué centro cursas tus estudios y dónde vives?
En el Instituto Luis de Camoens, el próximo año haré segundo de Bachillerato en rama de Ciencias. Vivo en el centro de Ceuta.
- ¿Conoces a más personas en Ceuta que hayan querido participar?
-No en este año pero conozco a expedicionarios que han viajado en años anteriores y me hablaron de lo que este viaje había cambiado sus vidas.
–¿A qué te gustaría dedicarte en el futuro?
-Farmacia o Nutrición
–¿Qué es lo más complicado hasta ahora dentro de esta experiencia?
-Lo más complicado por el momento es dormir poco, las esperas largas, el calor, no poderte bañar a diario...Y lo mejor es que esta experiencia me está resultando altamente positiva y enriquecedora, sobre todo a nivel personal. Hasta el momento está superando todas mis expectativas.