Nacido en el Tetuán del Protectorado, sus padres se trasladaron a Ceuta unos años después. Hablamos de Manuel López de Santamaría, una persona que siempre ha estado vinculada a esta ciudad. De niño soñaba con ser cirujano y no solo ese sueño se ha cumplido, sino que ahora también ha sido nombrado académico correspondiente de la Real Academia Nacional de Medicina.
Actualmente, López de Santamaría reside en Madrid, donde lleva más de media vida ejerciendo su profesión. A través de una charla telefónica, pudimos hablar con él sobre este nombramiento al que intenta restarle importancia así como sobre su larga trayectoria.
Al preguntarle por lo primero, ha querido dejar claro que en la Real Academia Nacional de la Medicina “hay dos tipos de académicos: los de número, que son los más altos, y luego académicos correspondientes. No se puede pasar de uno a otro sin pasar la voz intermedia, lógicamente. Entonces, lo que me han nombrado es académico correspondiente”.
Aunque él no lo considera “una cosa tan importante o trascendente”, sí que asegura que es “un honor” este reciente nombramiento ya que la Real Academia Española de la Medicina es una institución que va a cumplir cerca de tres siglos de historia.
En cuanto a cómo llegó este nombramiento, ha explicado que había que presentar una candidatura y “yo la presenté”.
Además, “tienes que presentar tu currículum, tu actividad profesional, etc. Y luego hay un comité dentro de lo que son los académicos numerarios y ellos se reúnen y escogen”, ha detallado.
Todo eso lo presentó a principios del pasado año y se resolvió en abril de este 2024, “que ya pues casi hasta se me había olvidado”, ha expresado López.
Manuel López de Santamaría aún se está “estrenando” en esto y no tiene claro “qué carga de trabajo me va a suponer”, aunque sabe que deberá realizar trabajos de “asesoramiento en el fomento de las actividades en la profesión médica y procurar mantener un nivel muy alto de nivel científico”, entre otras cosas.
Además, cada semana se celebran sesiones ordinarias en las que siempre hay “una presentación a cargo de un académico numerario y otra a cargo de un académico correspondiente y yo ya he presentado una propuesta de dar una conferencia. Cuando se me asigne fecha la daré”.
Cirugía Pediátrica
Llegar hasta aquí es también el resultado de muchos años de experiencia y dedicación profesional. Manuel López de Santamaría ha sido muchos años jefe del servicio de Cirugía Pediátrica del Hospital La Paz de Madrid.
Y es que, según ha contado, “a mí me gustaban la cirugía y la pediatría. Entonces, había una especialidad que estaba cuando yo hice la residencia, que no estaba reconocida cuando yo empecé por el Ministerio de Educación y Ciencia, que era la cirugía pediátrica. Aunque había la residencia, la formación por el periodo 2000 en Cirugía Pediátrica, era una especialidad relativamente nueva en España”.
“Luego ya, dentro de la Cirugía Pediátrica, me enfoqué más al mundo de los trasplantes y de la cirugía hepatobiliar y fracaso intestinal y gran parte de mi actividad ha estado desarrollada en trasplantes niños”, ha detallado el doctor.
A lo largo de su carrera profesional, López Santamaría ha tenido muchos éxitos aunque también saca su lado más modesto y manifiesta que “también ha habido algún fracaso” aunque de ellos “lo más se aprende”.
“Si te gusta tu profesión, la medicina en ese sentido es muy gratificante. Generalmente es muy vocacional por parte nuestra. Entonces, siempre que haces, te salen bien las cosas, te da una satisfacción que es muy superior. En ese sentido, la medicina es una profesión muy privilegiada. Es una fuente de satisfacciones. Todas las demás profesiones también lo tienen, pero en la medicina es particularmente importante este motivo de satisfacción”, ha indicado.
Formación constante
Mantenerse en lo más alto y ser considerado un referente como lo es Manuel López Santamaría implica estar siempre en constante formación.
Tanto, que “no pasa un día sin que estudie o que lea cosas nuevas. Eso es una cosa que tiene que ser constante y sobre todo a la velocidad que se están produciendo los nuevos descubrimientos y los nuevos avances en medicina. Dicen que cada cinco años se duplica el conocimiento médico y yo creo que incluso es más rápido todavía. Y si te estuvieses cinco años sin estudiar, estarías obsoleto ya”.
A día de hoy, López Santamaría continúa ejerciendo actividad privada dentro de la Cirugía Pediátrica, aunque ya se jubiló hace dos años por edad de lo público.
Antes de irse, se encargó de formar a quienes continuarán su camino y cuando se fue, les dijo que “vuestra obligación es superarme. No hacer lo mismo que hago yo, sino vosotros tenéis que superarme. Y en eso están, lo están haciendo bien. Dicho sea de paso”, ha recalcado Manuel López Santamaría.
Manuel López siempre ha estado vinculado a la ciudad autónoma
Desde que era un niño, Manuel López Santamaría tenía claro a qué quería dedicar su futuro: “No quería ser médico, quería ser cirujano”. Luego, “descubrí también que me gustaba la pediatría estudiando la carrera” y no dudó en unir sus dos sueños y ser cirujano pediátrico.
Este cirujano que llegó a lo más alto y ser considerado como un referente por sus compañeros de profesión, nació en el año 52 en Tetuán, cuando aún era Protectorado Español.
Desde pequeño siempre ha estado ligado a Ceuta porque “recuerdo, íbamos prácticamente todos los fines de semana” ya fuera a hacer unas compras o a ver una película en el cine.
Años más tarde, sus padres se trasladaron a vivir a la ciudad autónoma. Aquí, su padre, Manuel López Mercader, ejerció como docente en el IES Siete Colinas hasta su jubilación.
Por eso, aunque López Santamaría se trasladó a Granada a estudiar y luego a Madrid, donde ha desarrollado su carrera profesional, bajaba constantemente a Ceuta para ver a su familia, ya que aquí también residen sus dos hermanos.
“Yo me siento más de esa parte que realmente madrileño aunque llevo más de media vida aquí en Madrid”, asegura Manuel López Santamaría.