Si algo no se van a llevar de Ceuta los estudiantes universitarios que pasen uno o más cursos en la Residencia del Campus es un recuerdo “entrañable” del tiempo vivido en el antiguo acuartelamiento del Teniente Ruiz, en cuyas 38 habitaciones (en origen eran 42 pero hubo que prescindir de cuatro para poder disponer de algún espacio común que nadie se acordó de prever a tiempo) se pasan, sobre todo, penalidades, según expuso ayer en rueda de prensa el portavoz de Ciudadanos (Cs) en la Asamblea, Javier Varga.
En cada ala del Campus hay, en sus terceras plantas, 19 habitaciones en sendos pasillos a los que se accede sin necesidad de superar puerta alguna. En algunos cuartos hay goteras, Internet da fallos recurrentes, en ninguna habitación se dispone de calefacción (desde noviembre) ni aire acondicionado y se limpian una vez por semana, pues el operario que trabajara para la concesionaria del servicio a razón de dos horas al día solo limpia “8 habitaciones y lo que puede de las salas comunes” cada jornada.
No existe espacio para cocinar, la cafetería no da el servicio y hay un frigorífico para 19
En esas salas hay un par de lavadoras y secadoras, un sofá, un frigorífico-congelador de tamaño familiar (para casi 20 personas) y un microondas. No se puede cocinar pero tampoco comer en la cafetería del Campus porque no hay ese servicio pese a que se exigía en el concurso, por lo que los estudiantes de la Residencia, que pagan 250 euros al mes y “no suelen repetir” tras un curso, según Varga, deben recurrir a cualquier plato precocinado que, a ser posible, tampoco requiera estar en nevera.
La formación naranja denunció ayer que los afectados han trasladado sus quejas (también por las persianas estropeadas, por ejemplo) tanto a la UGR como a la Consejería de Educación como a la concesionaria del servicio pero “todo sigue igual”. Y puede ser peor: “Ni la Ciudad, responsable directa o indirecta de todo, ni Clece han facilitado ningún interlocutor o teléfono directo de contacto, ni para emergencias”, lamentó Varga la “caótica y patética” situación de una Residencia cuya gestión se licitó para 42 habitaciones, por lo que Ciudadanos sospecha si la Ciudad no es laxa con Clece porque esta ha tenido que prescindir, a su vez, de mil euros al mes.
Por si fuera poco, “la Sala de Estudio se encuentra no suficientemente insonorizada pese a que está al lado de una cafetería en la que los fines de semana suele haber fiestas de cumpleaños o comuniones y debajo de una pista polideportiva con campeonatos de baloncesto”. En suma, para Cs resulta inaceptable que el Gobierno de la Ciudad se “desentienda de su responsabilidad”.
como responsable de la cafeteria del campus universitario respondo a sus criticas.
señor vargas antes de hacer las denuncias que usted esta haciendo debe en primer lugar informarse de forma directa con los responsables de dichas conceciones, los motivos por los cualers no se da el servicio de comedor los dos ultimos años de cinco que llevo con la concecion es por el desequilibrio economico que se produce al dar dicho servicio.por otro lado el que la pared de separacion entre la sala de estudios y la cafeteria sea de pladur no se a que lumbreras se le ocurre eso.si desea saber algo mas para poder hablar con propiedad estare encantado de atenderle.