Los controles exhaustivos en la frontera y la acumulación de porteadores al otro lado dejan imágenes como estas. De bloqueos que inciden directamente en el normal funcionamiento del Tarajal y que persiguen poner orden sobre años de dejadez absoluta.
Numerosos agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han controlado la entrada discriminando a los vehículos patera, mientras cientos de porteadores intentaban entrar por el paso alternativo al ‘Tarajal II’. Los que entraban mostraban sus pies y el ticket… conseguido a fuerza de perder hasta los zapatos.
Y mientras en las naves, a primera hora se habían repartido solo 700 tarjetas, dejando las naves completamente vacías. Es, según los comerciantes, la agonía para el comercio del Tarajal. Ahora los colapsos y avalanchas se están produciendo al otro lado de la frontera.