La subsahariana a la que le tuvieron que amputar una pierna tras el accidente ocurrido con el coche-patera en el que la habían escondido para entrar en Ceuta ya ha abandonado la UCI del Hospital Universitario. Se encuentra en planta, según ha confirmado Ingesa, y estable. Tendrá que permanecer ingresada hasta que se recupere de todas las lesiones sufridas.
Ella, natural de Guinea Conakry y de 25 años, había ocupado el hueco habilitado en la defensa del monovolumen y fue la peor parada de los siete subsaharianos que participaron en este pase. El 061 la atendió en Arcos Quebrados, donde se produjo el siniestro, comprobando que las lesiones presentadas eran importantes. Ya en el HUCE se verificó lo peor, teniendo que amputársele la pierna izquierda.
Los otros subsaharianos están ya en el CETI, no presentan lesiones de gravedad y ya han cumplido el protocolo de ingreso en el centro de estancia temporal en donde permanecerán hasta el traslado a la Península. Ha sido mucho lo que han pasado en un suceso trágico en el que podían haber perdido la vida.
La conductora del coche-patera que terminó chocando contra una vivienda de Arcos Quebrados se dio a la fuga, la Policía la está buscando y existe ya una orden de busca y captura contra su persona. Dicho vehículo cruzó por la frontera del Tarajal cargado con las siete personas y terminó chocando contra esta vivienda. Fueron los Bomberos los que tuvieron que sacar a todos, escondidos como estaban en un doble fondo en los bajos y en el salpicadero.
La Policía Nacional mantiene abierta la investigación en torno a este suceso al objeto de ahondar más en todo lo que hay detrás de un pase que terminó de esta manera. Es uno de los pases más dramáticos que se han producido en nuestra ciudad en donde la ocultación de personas en dobles fondos está a la orden del día para burlar la frontera sur de Europa.