La Fundación SAMU se limitó a decir ayer que espera resolver “cuanto antes”, en horas o días, la problemática desatada por su falta de pago de las nóminas de junio a los trabajadores que tiene contratados en Ceuta para atender a los menores extrajeros no acompañados acogidos en Piniers y en los bajos de ‘La Esperanza’. La empresa no confirmó ni desmintió que haya adoptado esa medida después de un tiempo que tampoco precisó sin percibir ingresos de la Ciudad.
Según las fuentes consultadas por este periódico, la falta de abonos de la administración local se debe a los reparos que ha puesto la Intervención a mantener la concertación por emergencia de sus servicios más de un año después de la crisis migratoria de mayo de 2021, cuando accedieron y se quedaron en Ceuta alrededor de mil niños migrantes solos.
El departamento fiscalizador ha reclamado al Área de Menores un informe sobre el mantenimiento de la prestación del servicio de acogida, cuya licitación ya está en fase de tramitación desde finales de mayo, cuando se solicitó una retención de créditos incluida en el primer expediente de modificación del Presupuesto de la Ciudad de este año, que se aprobó definitivamente la semana pasada.
CCOO puso ayer en conocimiento de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social el retraso en el abono de las nóminas de los trabajadores de la plantilla de la Fundación SAMU, que según convenio deben cobrar entre el 1 y el 5 de cada mes. “Es obligación de la empresa cumplir en tiempo y forma en el pago puntual de las nóminas y no se puede usar a los trabajadores de la plantilla como arma arrojadiza contra la administración”, advirtió el sindicato.
La Ciudad Autónoma tiene tutelados actualmente a cerca de 300 niños foráneos no acompañados y solamente en junio se hizo cargo de 28 (22 marroquíes). Casi la mitad, concretamente 130, están atendidos por SAMU en las dos partes del alojamiento de Piniers que siguen abiertas y parte del Centro de Realojo Temporal de Hadu. Algo más de 80 se encuentran en ese mismo inmueble, pero acogidos de forma directa por el Área de Menores.
La Fundación factura un coste unitario por plaza ocupada a disposición de la Ciudad que oscila entre 50 y 70 euros cuando hay menor ocupación, como actualmente. SAMU prevé revisar a finales de julio la situación y el futuro laboral de los 14 trabajadores que mantiene con expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) desde finales de abril. Según algunos trabajadores, no cobran “ni un euro” desde entonces.
El director de su departamento jurídico, Enrique Irazusta, explicó a mediados del mes pasado a este periódico que SAMU seguía contando con 98 trabajadores en su cuenta de cotización de la ciudad, una cuarta parte de los que llegó a tener en nómina en los meses inmediatamente después de la avalancha migratoria, cifra que a finales del año pasado ya se había reducido a poco menos de doscientos.