Las salidas de inmigrantes del CETI siguen bloqueadas a la espera de que los centros de acogida de la península puedan disponer de plazas. Las únicas marchas las han protagonizado dos familias, que han podido dejar el centro de estancia temporal esta semana. Es lo único que se está permitiendo, al objeto de descongestionar los módulos y para evitar que permanezcan más tiempo de lo debido en unas condiciones que no son buenas.
En el CETI conviven más de mil personas, entre los que habitan los módulos y los que permanecen en las tiendas dispuestas por la Comandancia en los terrenos de la Hípica. Hay personas que llevan más de medio año esperando el momento de salir, pero la no existencia de plazas impide que puedan organizarse nuevas marchas.