Un total de 2.170 inmigrantes han perdido la vida en su intento de llegar a España por las distintas rutas migratorias marítimas en 2020, de los cuales 26 han sido víctimas en el Estrecho de Gibraltar, donde se registraron 7 naufragios, según los datos recopilados por el colectivo Caminando Fronteras.
El monitoreo que la ONG ha hecho este año- gracias a su teléfono de alertas y a los relatos de supervivientes o de las familias que están en búsqueda de personas desaparecidas- revela que las muertes de quienes arriesgan sus vidas en el mar por las diferentes rutas han aumentado un 143 % respecto a 2019, cuando contabilizaron 893.
Lo ha denunciado este martes la portavoz de la ONG, Helena Maleno, en la presentación del 'Monitoreo Derecho a la Vida 2020', en la que ha subrayado que los datos "son los más mortíferos de los últimos años, una vergüenza", y ha advertido de que las víctimas pueden ser muchas más: "las cifras que traemos, estamos seguras de que son", ha incidido.
Los servicios de rescate sólo pudieron recuperar en el Estrecho 4 cuerpos frente a los 22 inmigrantes desaparecidos.
A lo largo de 2020, la organización ha contabilizado 88 naufragios en las diferentes rutas por la frontera occidental euroafricana: 45 en el trayecto hacia el archipiélago canario; 23 en la ruta de Argelia; 13 en la de Alborán y 7 en la del Estrecho de Gibraltar. Los servicios de rescate sólo pudieron recuperar 88 cuerpos frente a los 2.082 inmigrantes desaparecidos, lo que supone que 95,9 % de las víctimas quedaron en el mar: "Es un porcentaje vergonzoso", ha calificado.
Perfil: varón, muchos de ellos adolescentes
En cuanto al perfil del migrante en esta ruta, Maleno ha remarcado que casi el cien son hombres, entre los que hay un elevado número de adolescentes, aunque ha recordado a las madres que el pasado verano vieron cómo las separaban de sus hijos a la espera de los resultados de ADN.
"Además de por la situación geográfica y la larga distancia de esta ruta, estas víctimas se deben al desmantelamiento de los servicios de rescate, a la falta de coordinación entre los estados (España, Mauritania, Senegal y Marruecos) que operan en el salvamento", ha criticado Maleno, que ha censurado la "laxitud" ante las llamadas de auxilio y la "tardanza" en los rescates.
Rechazo a la "criminalización y la persecución"
Caminado Fronteras ha rechazado la "criminalización y la persecución" de quienes migran y la "falta de proactividad" de los estados para mostrar a las víctimas: "quieren invisibilizarlas y estigmatizarlas, incluso a quienes las buscan".
Por ello, Maleno ha exigido al Gobierno que ponga en marcha medidas para que no se repita la "catástrofe humanitaria" de este año y que se facilite a las miles de familias que buscan a muertos y desaparecidos "una respuesta a lo que ha sucedido".
"A las personas desaparecidas, que se las busque; a los cuerpos encontrados que se les identifique y que tengan un entierro digno; que no se oculten más a las victimas de las fronteras, y que dé un paso adelante para señalar que las políticas de control de fronteras están matando a miles de personas", ha aseverado.
Argelinos, marroquíes, senegaleses…
En cuanto a los países de origen de los fallecidos en las distintas rutas migratorias marítimas, se han documentado nacionalidades de Argelia, Marruecos, Mauritania, Gambia, Senegal, Guinea Conakry, Guinea Bissau, Costa de Marfil, Camerún, Nigeria, República Democrática del Congo, Islas Comores, Siria, Bangladesh y Sri Lanka.