Entre 10 y 12 millones para construir la “Ciudad de la FP” en O'Donnell; suelo militar para levantar viviendas protegidas; mejoras en la conectividad (con subvenciones, más empresas de helicópteros, nuevos destinos marítimos como Málaga, ¿un aeropuerto?); y una rampa de acceso libre al mar para motos acuáticas y pequeñas embarcaciones. Esas son las cuatro peticiones que el secretario general del
PSOE de Ceuta, Juan Gutiérrez, ha incluido para su elevación vía Ferraz al Gobierno de Sánchez en la reunión de “reconstitución” del Consejo de Política Institucional que se ha celebrado este jueves en Daoiz. Gutiérrez y su homóloga melillense, Gloria Rojas (que se ha referido a él como “el próximo presidente de Ceuta”), se han reunido con la nueva coordinadora de ese órgano interno, la delegada del Gobierno en la ciudad hermana, Sabrina Moh, y la secretaria de Organización del PSOE caballa, Cristina Pérez. En el Consejo se dará cabida también a los responsables de Economía e Ideas y Programas de ambas ciudades, según ha adelantado Moh, para trazar una “hoja de ruta” política común que, respetando las diferencias de cada territorio norteafricano, sirva para avanzar en busca de “más calidad de vida” en las dos. Moh ha explicado en rueda de prensa que el proceso de elaboración de los Planes Estratégicos que para Ceuta y Melilla se ha comprometido a presentar este verano el Ejecutivo central es una “ventana de oportunidad” para que ambas ciudades den “un salto cualitativo” a la hora de “fortalecer los servicios públicos” esenciales que sigue prestando el Estado en ellas, como Sanidad o Educación. La delegada ha coincidido con Gutiérrez y Rojas en alabar el “impulso”, la “atención” y la “sensibilidad permanente” que Sánchez y su equipo están ofreciendo a Ceuta y
Melilla, ciudades que “hacía mucho tiempo que no despertaban tanto interés”, pero los secretarios generales se han descrito “inconformistas” a la hora de reivindicar un esfuerzo adicional a la Administración General del Estado. El líder del PSOE en Ceuta ha planteado cuatro prioridades, la primera conseguir “más implicación” del Ministerio de Educación para financiar la construcción de una “Ciudad de la Formación Profesional” en los terrenos del antiguo Hospital Militar, proyecto que según ha calculado necesita a la mayor brevedad de una inyección económica por importe de “entre 10 y 12 millones”. Además, Gutiérrez ha abogado por liberar suelo militar en desuso para facilitar la construcción de
viviendas de protección oficial (VPO), algo que según ha remarcado en Ceuta solamente hacen los socialistas. También ha reclamado acciones para
“mejorar la conectividad” con la península, ya sea ampliando las subvenciones a residentes vigentes del 75%, extendiéndolas de alguna forma a no empadronados, diversificando los destinos y frecuencias de los enlaces marítimos más allá de Algeciras (por ejemplo, a Málaga), ampliando el número de compañías de helicópteros operando o recuperando la idea de construir un aeropuerto. “Es fundamental porque la conectividad genera oportunidades y economía”, ha resumido. Además, el líder de la oposición en la Asamblea ha reivindicado que el Ministerio del Interior busque alternativas para, sin poner en riesgo la seguridad y la lucha contra el tráfico de personas o drogas, abrir una rampa de acceso libre al mar que pueda ser utilizada por los propietarios de motos acuáticas o pequeñas embarcaciones, todo ello para evitarles el desembolso de “entre 120 y 150 euros por salida” y para fomentar “el turismo náutico”. Rojas, por su parte y para la otra ciudad autónoma, ha incidido en la necesidad de “abaratar el transporte a Melilla de los no residentes”; de dotar económicamente el traslado a una nueva ubicación de las facultades de la UGR “y construir un parque tecnológico, un vivero de empresas y un centro público de FP”; y de construir más viviendas públicas. Los tres políticos socialistas han evitado, sin embargo, pronunciarse sobre si es conveniente que España tramite la eliminación de la excepción que en el Tratado de Schengen permite la entrada en Ceuta y Melilla sin visado de los marroquíes residentes en las provincias más cercanas del
país vecino, particularidad que actualmente está suspendida temporalmente y que el Gobierno de Ceuta que preside Juan Vivas ha pedido suprimir.