La Asociación Protectora de Animales y Plantas de Ceuta exige la suspensión inmediata de cualquier sacrificio de animales sanos capturados en la vía pública y la aplicación de las alternativas previstas en el Plan de Contingencia de la Rabia 2023, aprobado por el Ministerio de Sanidad.
Para que esta petición se lleve a cabo, ha registrado un escrito complementario ante la Consejería de Sanidad de la Ciudad Autónoma, según han informado desde la entidad.
En cuanto al plan anteriormente citado, comentan que este explica que los animales errantes sin identificar deben pasar un periodo de observación de 21 días, y solo en caso de no ser reclamados por su propietario “serán sacrificados de acuerdo con la normativa vigente”.
Sin embargo, el mismo documento introduce una alternativa clara que la Ciudad “está ignorando”, comentan mientas señalan que: “En los casos en los que el sacrificio no sea posible, se hará evaluación del riesgo y determinación de las medidas de control, entre ellas: titulación basal de anticuerpos, vacunación y cuarentena y observación activa durante un período mínimo de dos años.”
Una excepción que apuntan que ya se está llevando a cabo en otras comunidades y que “demuestra que la eutanasia no es la única opción legal ni sanitaria y que existen mecanismos seguros de control y seguimiento para los animales sanos que no presenten signos de mordedura o contacto de riesgo”.
Motivos justificados para el sacrificio
Asimismo, recuerdan que la Ley 7/2023 de Protección de los Derechos y Bienestar de los Animales, de rango superior, “prohíbe el sacrificio salvo por motivos estrictamente sanitarios y debidamente justificados”.
Por tanto, “la aplicación mecánica del sacrificio a los 21 días no solo contradice el espíritu del Plan de Contingencia, sino que vulnera directamente la legislación estatal y el principio de jerarquía normativa”, comentan.
“El Plan dice que el sacrificio debe hacerse ‘de acuerdo con la normativa vigente’, y la normativa vigente, la Ley 7/2023, no permite matar animales sanos por el simple transcurso de un plazo administrativo”, explica la asociación.
Garantizar el control sanitario
La entidad denuncia, además, que la Ciudad, como administración titular de los animales errantes, debe asumir su papel de propietaria y garantizar su control sanitario mediante identificación, vacunación, cuarentena y trazabilidad, en lugar de alegar abandono para justificar el sacrificio.
“El propio Plan establece que, si un propietario reclama al animal, se actuará conforme al régimen de animales en cautividad. En Ceuta, los animales de la vía pública no tienen propietario privado: su titular es la propia Ciudad. En el momento en que los captura, ya están reclamados y bajo su responsabilidad directa. Aplicarles la regla de sacrificio por abandono es una incoherencia legal y ética”, indican.
Aplicar la alternativa de vacunación
En su escrito, la Protectora solicita formalmente a la Consejería que aplique la alternativa de vacunación, titulación de anticuerpos y cuarentena prolongada prevista en el Plan en lugar del sacrificio automático.
Además, también piden que reconozca la titularidad pública de los animales de la vía pública y los trate conforme al régimen de animales en cautividad y que someta cualquier eutanasia a resolución individual y motivada basada en riesgo sanitario concreto, conforme al artículo 27 de la Ley 7/2023.
Por último, solicitan que habilite zonas de cuarentena municipales y convenios de colaboración con entidades protectoras y clínicas veterinarias para garantizar el control sanitario sin recurrir a medidas letales y que incorpore a la Protectora de Animales de Ceuta como miembro consultivo permanente en el Comité de Coordinación de Rabia y en el Grupo de Apoyo Técnico, en cumplimiento del principio de participación y transparencia”.
Carencia de base legal
La Protectora considera que la medida prevista por la Ciudad, proceder al sacrificio de forma generalizada, “carece de base legal, contradice las directrices del propio Plan estatal y supone un retroceso ético y sanitario inaceptable”.
“La rabia se controla con vacunación, trazabilidad y cuarentenas, no con matanzas indiscriminadas. Ceuta tiene la obligación legal y moral de actuar con rigor, humanidad y transparencia”, añaden.
Llamamiento a la sociedad
Por todo ello, la asociación hace un llamamiento a toda la sociedad ceutí, a las entidades sociales, a las asociaciones de protección animal y a los organismos nacionales e internacionales para que respalden públicamente esta exigencia de cumplimiento de la ley y de protección de la vida animal.
Asimismo, pide la intervención del Ministerio de Sanidad y del Ministerio de Agricultura para asegurar que Ceuta actúe conforme al Plan y a la Ley 7/2023.
“Vamos a seguir esta situación muy de cerca y, si es necesario, acudiremos a todas las instancias nacionales y europeas. Ceuta no puede convertirse en un laboratorio de crueldad ni en una excepción al cumplimiento de la ley”, finalizan.
La Ciudad aclara que "no se ha sacrificado" a ningún animal
Posteriormente, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales ha deseado pronunciarse para decir que es "rotundamente falso" que, tal y como dice a asociación, se haya producido un sacrificio “indiscriminado” de animales.
"Es más, no se ha sacrificado ninguno. Todos los animales errantes localizados en la zona de riesgo en la que se detectó el caso positivo de rabia están siendo mantenidos bajo observación, cumpliendo estrictamente las indicaciones del Plan de Contingencia para el Control de la Rabia Terrestre en Animales en Cautividad y Silvestres en España. Y tal y como establece dicho Plan, sólo se adoptarán medidas excepcionales, como la eutanasia, en caso de que un animal presente síntomas graves de enfermedad irrecuperable o signos compatibles con la rabia, siempre bajo criterio clínico y priorizando su bienestar".
"Y respecto a los felinos ferales de la zona de riesgo, se ha decidido valorar su confinamiento hasta por dos años únicamente si es compatible con su bienestar, evitando que sufran daños por un encierro prolongado", explican en un comunicado.
La Consejería coordina la convocatoria del consejo de valoración de las medidas a establecer ante la presencia de un caso confirmado de rabia, siguiendo las instrucciones del citado Plan de Contingencia, aprobado por la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta y la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud en noviembre de 2023.
"Las eutanasias sólo están justificadas por riesgo para la salud pública"
"Dicho Plan prioriza, como no puede ser de otra forma, la seguridad de las personas y la protección de la salud pública. Las eutanasias sólo están justificadas por esos motivos: seguridad de las personas o animales, o por riesgo para la salud pública", detallan.
Todas las medidas adoptadas en Ceuta tras la confirmación del caso de rabia "han sido trasladadas y validadas por los organismos competentes del Sistema Nacional de Alerta Precoz y Respuesta Rápida, el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad y el Comité de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, garantizando que las actuaciones se desarrollan con rigor y conforme a la normativa vigente".
Finalmente, la Consejería ha recordado que "la lectura y comprensión de la Ley 7/2023 y el Plan de Contingencia ha de ser completa y responsable, no cuestionando el trabajo de los técnicos que exponen las obligaciones y prohibiciones para con los animales y personas y que está ajustado a lo recogido por la normativa vigente y documentos de trabajo".
Por todo lo expuesto, la Consejería ha sostenido que está "comprometida con el bienestar animal, la protección de la salud pública y la prevención sanitaria", asegurando que todas las medidas se adoptan "de manera responsable y conforme a la normativa en vigor".
La Protectora vuelve a responder: piden una "rectificación pública"
La Protectora de Animales de Ceuta exige "transparencia y una rectificación pública" a la Consejería de Sanidad: “Si no se van a sacrificar animales sanos, que se comprometan por escrito y lo garanticen ante la ciudadanía”.
La Asociación Protectora de Animales responde al comunicado emitido por la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales en el que se desmienten las afirmaciones realizadas por esta entidad.
"Desde la Protectora queremos aclarar que en ningún momento se ha denunciado un sacrificio consumado, sino la intención y el riesgo real de que la Ciudad Autónoma de Ceuta aplique de forma literal el artículo del Plan de Contingencia de la Rabia 2023 que prevé el sacrificio de animales errantes sin identificar una vez transcurridos 21 días, sin haber aclarado todavía si optará por la alternativa legal prevista en el mismo Plan: vacunación, titulación de anticuerpos y observación prolongada durante dos años".
El comunicado de la Consejería confirma que actualmente los animales "están bajo observación, lo cual valoramos positivamente, pero no despeja la preocupación principal, qué ocurrirá con ellos al finalizar el periodo de cuarentena".
"Si no se va a sacrificar ningún animal sano, pedimos que lo confirmen por escrito"
"La Consejería debe aclarar si piensa aplicar el sacrificio automático o si adoptará la vía alternativa prevista en el propio Plan. Si realmente no se va a sacrificar ningún animal sano, pedimos que lo confirmen por escrito y que lo comuniquen públicamente", reivindican.
Asimismo, "recordamos que el cumplimiento del Plan de Contingencia debe ser integral, no selectivo": "Si se cumple “estrictamente”, debe aplicarse también la parte que contempla alternativas al sacrificio. Hasta el momento, la Consejería no ha comunicado la habilitación de zonas de cuarentena prolongadas, ni ha informado de la capacidad instalada para aplicar esas medidas, lo que genera incertidumbre sobre la ejecución práctica del protocolo".
Por otro lado, la Consejería insiste en que las medidas están “validadas por los organismos competentes del Sistema Nacional de Alerta Precoz”. Sin embargo, esta validación se limita a la coherencia epidemiológica, no a la interpretación jurídica.
"La Ley 7/2023 de Protección de los Derechos y Bienestar de los Animales, de rango superior, prohíbe expresamente el sacrificio de animales salvo por motivos de salud pública debidamente justificados y documentados, lo que excluye el sacrificio automático tras 21 días. En virtud del principio de jerarquía normativa, ningún plan o protocolo puede anular una ley estatal".
Además, la Ciudad Autónoma de Ceuta, "como administración titular de los animales de la vía pública, tiene la responsabilidad legal de actuar como propietaria de los mismos". "Ello implica que debe aplicar el régimen previsto para animales en cautividad, vacunación, identificación y observación, y no ampararse en un supuesto de “abandono” para justificar un sacrificio que carece de base legal".
La Protectora también recuerda que el propio Plan de Contingencia prevé la participación y coordinación de las entidades implicadas.
Por ello, "reiteramos nuestra exigencia de formar parte del Comité de Coordinación de Rabia y del Grupo de Apoyo Técnico, como entidad que trabaja directamente con los animales errantes de Ceuta, para garantizar que las decisiones se adopten con transparencia, rigor técnico y sensibilidad ética".
"Esta nota nace precisamente porque estamos completamente convencidos de que la intencionalidad inicial de la Ciudad era proceder al sacrificio automático y no son reclamados esos animales, y por ello consideramos imprescindible advertirlo públicamente. Nos alegra que este comunicado haya despertado la conciencia y la alerta, porque demuestra que no pueden actuar unilateralmente ni al margen del control social y legal, y que la ciudadanía está atenta".
"Si la Ciudad está comprometida con el bienestar animal, que lo demuestre con hechos y documentos"
La Protectora, además, se encuentra en contacto con los organismos responsables de Madrid, y también con Melilla, para trasladar la situación y asegurar que en Ceuta se cumpla la ley en toda su extensión.
"Desde esta asociación manifestamos nuestro respeto por el trabajo de los técnicos, pero rechazamos la actitud política de la Consejería al descalificar una legítima preocupación ciudadana y social. La protección de la salud pública y el bienestar animal no son objetivos opuestos, sino complementarios. La rabia se combate con vacunación, cuarentena y trazabilidad, no con amenazas de sacrificio ni con falta de información".
"Reiteramos nuestra disposición a colaborar y pedimos formalmente a la Consejería que convoque a la Protectora a la próxima reunión del Comité de Coordinación de Rabia, que aclare por escrito el destino de los animales bajo observación y que confirme públicamente que Ceuta no aplicará el sacrificio automático de animales sanos".
“Si realmente la Ciudad está comprometida con el bienestar animal, que lo demuestre con hechos y documentos, no con desmentidos políticos", han concluido.
