La magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta ha condenado a 3 años y 1 día de prisión por un delito de contrabando a tres detenidos por la Guardia Civil, en julio de 2019 y en la playa del Desnarigado, a bordo de una narcolancha. En aquella operación participaron componentes del Servicio Marítimo y hasta un helicóptero oficial, llegando a arrestar a cuatro personas. Solo tres comparecieron a la vista judicial celebrada la semana pasada: los llamados M.Y.L.A., M.R. y C.E.H., recibiendo la misma condena que ahora será recurrida ante instancia superior.
Los hechos a los que hace referencia esta sentencia, a cuyo contenido íntegro ha tenido acceso El Faro de Ceuta, se produjeron en la madrugada del 28 de julio de 2019 cuando agentes de la Guardia Civil localizaron a los ahora condenados a bordo de una semirrígida por la bahía sur. Al verse sorprendidos, emprendieron la huida a gran velocidad, embarrancando en la playa del Desnarigado. La lancha, de 12 metros de eslora y 3 motores de 350 caballos cada uno, estaba valorada en 159.783 euros y supone un género prohibido no estando apta para la navegación, de acuerdo con las directrices publicadas por el Ministerio del Interior en su lucha contra las narcolanchas. Se la había borrado el número de serie y la placa identificativa del constructor.
En sentencia se recoge la vinculación de los tres acusados con el delito
Los propios acusados reconocieron en el acto de juicio oral que estaban a bordo de esa embarcación, incluso dos de ellos declararon que sabían que ese tipo de lanchas están prohibidas. El llamado M.Y.L.A. indicó que le habían ofrecido 1.500 euros por arreglar los motores, por lo que se subió a una barca más pequeña en el puerto deportivo para llegar hasta la semirrígida. El acusado M.R. dijo que estaba pescando y que al ver la lancha, que ocupaba un amigo suyo, se subió porque le invitó a dar una vuelta. El tercer acusado C.E.H. ofreció otra versión ajena a la comisión de un delito.
Frente a estas manifestaciones estaban las ofrecidas por los guardias civiles que intervinieron en este servicio, quienes corroboraron la existencia de una persecución y el arresto de los ocupantes de la narcolancha tras alcanzar el Desnarigado y pretender su escapada.
En sentencia la magistrada considera que los acusados son autores criminalmente responsables de un delito de contrabando, al ser poseedores de un tipo de embarcación que además sabían que constituía un género prohibido.
Los delitos de contrabando están penados con hasta 5 años de cárcel. En el caso de marras, se trata de un contrabando de género prohibido, por lo que la pena marca un límite mínimo de 3 años y 1 día de prisión, que ha sido la fijada por la magistrada, así como una multa equiparable al precio de la lancha. En caso de impago se establecen 15 días de prisión más, siguiendo el criterio establecido por la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta, en su Sección VI.
Los acusados se enfrentaban a penas de 4 años de cárcel, habiéndose presentado solo tres a juicio oral ya que el cuarto detenido, llamado M.R.M., se encuentra en situación de rebeldía. Tal y como explicó el Instituto Armado el día en que se llevó a cabo la operación, los detenidos -vecinos de Ceuta, La Línea y Marruecos- emprendieron la escapada pero pudieron ser alcanzados en las inmediaciones del Hacho, después de que emprendieran la carrera al perder su embarcación. Durante todo el tiempo además de patrullas de tierra y del Servicio Marítimo se contó con la participación del helicóptero que no perdió de vista a los condenados y a la narcolancha que ocupaban.
Este arresto se produjo en un verano de continuo trasiego de embarcaciones que, por sus características, son de las utilizadas para el tráfico de estupefacientes. En el caso de marras no se encontró droga, pero el Instituto Armado valoró el género prohibido que constituía el empleo de este tipo de semirrígidas. Y es que Ceuta se antoja en lugar clave para el tráfico de hachís pero también de inmigrantes. Es la ruta del delito, punto idóneo para la acción de los criminales que tienen las costas peninsulares como punto de descarga del hachís que crece en las plantaciones de Marruecos.
Los ahora condenados no negaron haber estado en la semirrígida
Se nutren de narcolanchas capaces de cargar toneladas, pero también motos de agua que marean a las fuerzas de seguridad en un ir y venir constante de pases. Son también enlaces que buscan despistar a los agentes para facilitar que los grandes narcos hagan su trabajo. La acción constante de las fuerzas de seguridad evita muchos pases y aborta tragedias en pases de personas a las que se pone en riesgo.
Muchas veces los delitos se combinan para hacerlo aún más rentable uniendo drogas y personas.
Este juicio se había suspendido en, al menos, una anterior ocasión.
3 años Nooo que esto con el descuento se queda en tres meses lo justo seria 30 años y a sin los próximos se lo piensan