La Jefatura Superior de la Policía Nacional de Ceuta cerró ayer la ‘semana grande’ de los actos organizados con motivo de su bicentenario, que se extenderán durante todo este 2024, enfatizando el mejor mensaje posible, el de la necesidad de acercar al conjunto de la ciudadanía a quienes se encargan de velar por su paz y seguridad cotidiana.
En una gala de más de dos horas de duración, el Cuerpo supo poner en valor su pasado y a aquellos que han dejado la vida por su vocación de servicio, su presente como una de las Fuerzas de Seguridad más reconocida en todo el mundo y el próspero futuro que se le pronostica gracias a su apuesta por la formación y la actualización constante para el desempeño de los cometidos que tiene asignados.
Algunos guiños del acto resultaron especialmente acertados, como la utilización del árabe ceutí, lengua materna de la mitad de los caballas, o la inclusión de mensajes de representantes de todas las comunidades religiosas y culturales que tejen la sociedad de la ciudad autónoma.
Uno de los jóvenes locales que se encuentra actualmente en la Academia de Ávila conectó por ahí directamente a Ceuta con el Cuerpo. Son, indicó, dos entornos en los que las diferencias se viven con normalidad y respeto.
Cariño y exigencia de la ciudadanía es lo que pidió el jefe superior a los ceutíes como el mejor estímulo que pueden tener las mujeres y hombres bajo su mando para seguir realizando su no muchas veces agradable labor en la batalla cotidiana contra el crimen en sus más diversas manifestaciones. Ese es el espíritu y la vocación de servicio que ha representado y debe seguir haciéndolo a la Policía Nacional.