Se llaman Andan Belkassemi, Hicham Chahman, Saad El kriche, Mohamed Channa, Mohamed Reda, Abdelhak Abrouk y Moussa Boudagha. Tienen en común no solo haber compartido estancia en el centro para menores marroquíes dispuesto por el Gobierno de Ceuta, sino también su participación en la elaboración de un Playmobil legionario en el que han plasmado todo su arte.
Coordinados por la responsable de este taller, Elia Campos, el equipo de artistas se puso manos a la obra para aportar su granito de arena en la próxima edición de la Cuna de la Legión que tendrá lugar este sábado.
De lunes a domingo, mañana y tarde, durante dos meses y una semana, han cooperado en la realización de unos legionarios que componen la banda de música. Y no les ha faltado detalle, incluyendo la confección de escudos, simbología y tatuajes a mano alzada. Ojo, que todo se ha hecho con precisión, porque los tatuajes de este Playmobil existen en verdad.
Campos explica a este periódico cómo iniciaron esta aventura en la que “lo hemos disfrutado al máximo”. Y no solo ellos, los artistas, sino también han encontrado una respuesta cariñosa, empática y cercana en los componentes del Tercio, que departieron con los chavales en su visita al centro este pasado martes.
La regla de las 3 erres
Para hacer estos legionarios, echaron mano de la regla de las 3 erres: reutilizar, reducir y reciclar. Así, se hicieron primero con cartón para realizar el encofrado interior que es mucho más grueso y que por fuera es más fino.
Usaron silicona caliente y capas de papel reciclado, así como crearon una especie de papilla a base de papel blando batido y reposado en agua. Con esa masa y cola se fue dando forma a lo que es el cartón piedra.
Dos capas de pintura sirvieron para darle la apariencia a los legionarios, usando para los detalles todo tipo de material, también botellas, siempre reciclado.
Un equipo de legionarios atendiendo a la diversidad
Se ilustraron en los detalles mirando imágenes por internet y se esmeraron en que todos estos componentes de la banda de la Legión reflejaron la diversidad existente en la sociedad. Así, hay una mujer legionaria, un legionario más bajo, otro más alto, uno más grueso, otro más delgado...
Detrás de este taller de manualidades se ha conseguido avanzar en los valores que el equipo de monitores aplica en el centro de La Esperanza, como los derivados de un trabajo en equipo, el aprendizaje de español, conocer también las técnicas básicas de oficios artesanales mediante la pintura o el encofrado…
El resultado ha enamorado no solo al propio centro y a cualquiera que admire este Playmobil legionario, sino, también, a los miembros de la Legión. Estos chicos de ‘La Esperanza’ hacen maravillas y lo demuestran en silencio, dando el mejor de los ejemplos a la sociedad.