La plantilla de la Real Federación de Fútbol de Ceuta (RFFCE) ha revocado a los que hasta ahora eran sus dos representantes sindicales de UGT. Así se ha decidido en una asamblea en la que participaron, el pasado viernes, 28 de sus 33 trabajadores.
Ese ha sido el desenlace del conflicto desatado en su seno con la renovación del Convenio Colectivo.
Con dos delegados ugetistas y uno de Comisiones Obreras (CCOO), los representantes del plantel no llegaron a un acuerdo, por lo que sus propuestas de borrador empezaron a avanzar por caminos divergentes.
Finalmente fue CCOO el sindicato que llegó a un acuerdo con la patronal para cerrar un acuerdo que, por su representatividad, se quedó como de validez limitada. A pesar de ello, 29 de los 34 trabajadores con los que hasta hace nada contaba la RFFCE se adhirieron al mismo.
El acuerdo, según fuentes de Comisiones, contempla una actualización salarial con carácter retroactivo, el reconocimiento de antigüedad y nocturnidad para algunos trabajadores de campo y una subida de sueldos para el año que viene del 2% al menos “y superior en el caso de que el IPC continúe alto y se den las condiciones económicas para asumirlo”.
Al final la cada vez más enconada relación entre la cúpula de la Territorial y los representantes de UGT derivó en una asamblea de revocación de los dos delegados de esa central. Ahora la RFFCE queda pendiente de unas elecciones parciales para escoger un tercer portavoz de las demandas y reivindicaciones de la plantilla.
UGT denunció la semana pasada que el presidente de la Federación había “amenazado” al padre de una trabajadora “con despedirla si no firmaba un acuerdo al que había llegado con CCOO”.
“La guerra de Gaona contra los sindicatos y de todo lo que huela a democracia viene de lejos, ya que, en marzo, ante la presentación de dos candidatos no propuestos por él, organizó una reunión con todos los trabajadores excepto los candidatos, ordenando al resto de trabajadores que no votaran a los candidatos de UGT”, recordó.