“¡No hay seguridad en Ceuta!”

• Casi un millar de personas se reunió ante la Delegación del Gobierno para protestar contra la inseguridad

• Entre los asistentes había víctimas de delitos o familiares, se leyeron manifiestos reclamando respuestas contundentes

• Hubo mensajes dirigidos al delegado

Carmen Echarri ceuta

Casi mil personas se dieron cita en la plaza de los Reyes para protestar contra la inseguridad y exigir una acción contundente de la clase política. Dejaron claro que no arremetían contra las fuerzas de la seguridad pero sí que cuestionaban la respuesta que está dando la clase competente a un problema que, insistieron, se había desbordado. Las críticas a la ley del menor también se hicieron notar, acrecentadas por el hecho de que en los últimos delitos se han visto implicados adolescentes.

La lluvia no frenó una protesta cuyo poder de convocatoria radica en las redes sociales y cuyos promotores insistieron en que será el primero de los pasos que se va a dar. Hubo muchos mensajes dirigidos al delegado del Gobierno, Nicolás Fernández Cucurull, a quien pedían que saliera a la plaza. Policía Nacional y Local, visibles, controlaban el desarrollo de esta protesta, sumándose otros compañeros de paisano para recabar datos y estimaciones sobre participación.

“Tenemos mucho miedo porque ultimamente están sacando muchas navajas, robando a los niños, gente mayor. Nunca se ha visto esto en Ceuta. Y con la Ley del Menor nos tienen amargados, que mi hijo tiene que salir a la calle y yo detrás de él. Necesitamos más seguridad, que la Policía no se quede escribiendo whatsapp en la explanada del Chorrillo mientras a la gente le están robando”, denunciaba una madre ante las cámaras de FAROTV y demás medios de comunicación citados a la convocatoria. “Están viendo a menores con cuchillos en la mano y pasan del tema”, añadió.

“¡No hay seguridad en Ceuta!, esto no se ha visto aquí nunca jamás”, indicaba otra mujer entrada en años, participante también en esta reunión pacífica. “Que se entere España entera y que salga el delegado y dé la cara”, replicaba.

Entre los presentes había familiares de víctimas de hechos delictivos. Por ejemplo la abuela o el padre de la menor a la que le fracturaron la nariz por dos sitios para robarle el teléfono móvil en vísperas de la Mochila. Aquel suceso marcó un antes y un después por la violencia empleada y el hecho de que el ataque se produjera a plena luz del día y se arremetiera de esta manera contra la menor para quitarle su celular. A través de change.org se inició una recogida de firmas reclamando mayor seguridad. “Le partió la nariz para quitarle un móvil. Si ese hijo de puta hubiese estado en su casa o en un centro recogido, mi nieta podría salir a la calle. No que nosotros tenemos que vivir como en Carabanchel, lleno de rejas nuestras casas, y los delincuentes en la calle. Que era la víspera de la Mochila... ¿y la Policía? estarían picando piñones para la Navidad...”, expuso la abuela de la menor.

Hubo lectura de tres manifiestos. Uno de ellos leído por una víctima de un robo que, a su vez, es familiar directo del peluquero Juan de la Peña, brutalmente asesinado en el interior de su peluquería. “Tres indeseables me eligieron como víctima... me tocó, como le pudo tocar a cualquiera”, recordó emocionado, ayudado de unas muletas que debe utilizar debido a las secuelas sufridas tras aquel episodio.

“Cuando descubrieron que por las lesiones causadas era imposible levantarme siguieron golpeándome, cuchillo en mano y entre risas”, expuso. “La sentencia judicial no fue la que esperaba, muy poco tiempo en prisión para una vida completamente destrozada, una indemnización solidaria que no he visto ni de la que veré un solo duro, muchos ingresos hospitalarios, muchas intervenciones, mucho dolor, la vida destrozada. Mi pasado, presente y futuro perdido por las canalladas de tres sinvergüenzas. Y no acaba aquí la cosa, soy primo de Juan de la Peña, el peluquero, asesinado a escasos cien metros de aquí. No te olvido primo”, recordó. “Estos no son casos aislados como algunos dicen. Dejen de  mirar a otro lado, asuman sus responsabilidades no permitan que su pueblo camine con miedo”, resaltó.

Además de las cartulinas que contenían mensajes alusivos a la sensación de inseguridad, se insistieron en varias claves durante la lectura de manifiestos, apoyados por megafonía. “No nos atrevemos a ir por sitios oscuros, nuestros hijos también tienen miedo. Día tras día roban, asaltan a alguien, queman coches y hay abusos sexuales. Esto no pasa como en otra época en barrios marginales o de madrugada, en pleno centro y a las cuatro de la tarde se produce una agresión o un robo. Estamos hartos, esto no para. No queremos señalar a colectivo, raza o religión, solo queremos expresar nuestro descontento con las medidas adoptadas y la inoperancia de quienes nos gobiernan tanto a nivel local como nacional. No nos parece bien un uso partidista de esta reunión. Estamos hartos, no vamos a permitir que nuestros hijos tengan miedo y que los ancianos no quieran salir de sus casas”, apostilló una de las participantes en la reunión.

Dejaron claro su apoyo a las fuerzas de seguridad del Estado porque también “son padres, hijos y afectados por esta inseguridad”. “Ya es hora de que nos den una solución y se identifique a los culpables. ¡Por una Ceuta unida y segura, viva Ceuta!”, exclamó, recibiendo cientos de vivas a modo de respuesta. La lluvia, que acompañó de forma permanente la concentración, no frenó la asistencia, transformando la plaza de los Reyes en un abanico de paraguas de distintas tonalidades.

El grupo de Facebook que ha movido esta concentración está formado por más de 12.000 miembros, por lo que hubo cierto malestar, expresado en ese mismo grupo, ante la confianza de una mayor participación. No obstante, la plaza se llenó a pesar de que se entendió como una traba la colocación del Belén Viviente de la FPAV cuya instalación estaba prevista desde hacía tiempo ya que siempre se celebra en el fin de semana previo a la Nochebuena.

“Hace unos años todos podíamos pasear tranquilamente a horas de la madrugada sin ni siquiera pensar que podíamos ser víctimas de un atraco o un robo. Esa sensación ha desaparecido. Ahora los malhechores nos están ganando la partida, están consiguiendo que la gente salga a la calle asustada, están consiguiendo que nos sintamos como en un callejón sin salida porque la inseguridad se está adueñando de nuestra ciudad. Ceuta se llamaba la Perla del Mediterráneo y así sigue siendo, pero unos pocos están intentando llevarse la perla y dejarnos solo con la cáscara”, recalcaron en el manifiesto, con el que insistieron en que el movimiento ciudadano presente ante la Delegación carecía de corte político y tampoco perseguía demonizar a un colectivo concreto de personas, sean o no inmigrantes. Tampoco menospreciar a las fuerzas de seguridad, para la que pidieron más medios.

“Todos nos queremos seguir más seguros”, insistió, pidiendo colaboración entre fuerzas para elaborar planes de seguridad así como lograr una implicación mayor de la clase política. “Os toca pensar y actuar pero queremos soluciones ya. No queremos más casos de violencia por la calle, queremos estar seguros paseando a cualquier hora del día o de la noche. Queremos una Ceuta segura”. La concentración duró cerca de una hora y terminó como empezó sin la generación de problemas ni incidentes y con la toma en su práctica totalidad de toda la plaza.