Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Brigada de Extranjería y Fronteras de Ceuta, y más concretamente la UCRIF (Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedades Documentales), detuvieron en la tarde del lunes a una persona que facilitaba el paso de inmigrantes mediante el uso de un certificado de empadronamiento falso.
Los hechos sucedieron en la tarde del lunes cuando la UCRIF, tras varios meses de investigación, detuvieron a cuatro personas por tales hechos: una que a través de certificados de empadronamientos falsos facilitaba el pase a la Península de personas extranjeras no residentes peticionarios de asilo y a tres más por el uso de dicho empadronamiento a sabiendas de que era fraudulento. Además se falsificaban también contratos de arrendamiento.
Su finalidad era salir de Ceuta presentando certificado de empadronamiento y contratos de alquiler de la vivienda en la Península correspondiente a una persona que les invita, siendo toda la documentación falsa.
Los documentos por los que cobraba cuatrocientos euros, reflejaban una serie de datos absolutamente falsos como la firma, domicilio de la residencia y el sello oficial. Con esta intervención la UCRIF ha conseguido abortar una vía de salida que se producía teñida de ilegalidad, puesto que se estaba fomentando un tipo de traslados a la Península que no podían hacerse porque venían teñidos con documentación falsa.
Con esta intervención se avanza aún más en las indagaciones en torno a las irregularidades que se producen vinculadas con las personas extranjeras para conseguir que puedan salir de Ceuta. Las personas que piden asilo necesitan de este tipo de documento para poder salir a la Península, toda vez que les requieren que estén residiendo de manera regularizada en una vivienda, esto había sido utilizado por esta persona para poder hacer negocio a costa de esa pretendida salida. Se había montado un negocio anulado ahora por la Policía.
Esto es sólo la punta del iceberg, hay gente que se dedica a esto, en el Ayuntamiento y ectrangeria hay que tener los ojos bien abiertos
Ahora solo falta que investiguen las nacionalidades concedidas durante la pandemia, que también tienen manteca colorá.