El Atlético de Ceuta y la Federación de Fútbol continúan con su pugna particular y ayer se produjo un capítulo más en el estreno del club ceutí en el 'Murube'.
Tras la negativa por parte de la entidad que preside García Gaona (representado ayer en el estadio por José María Oliveira) a que el Atlético sitúe su propia publicidad, los empleados federativos fueron expulsados de la zona de vestuarios por personal del club.
Pero en donde se focalizó la tensión entre ambas partes fue en el 'ambigú', cuya cesión fue llevada a cabo, nuevamente, por la Federación de Fútbol de Ceuta.
Miembros de la Policía Nacional pidieron la documentación a los responsables de dicha instalación ante la atenta mirada del presidente de la casi desaparecida Asociación Deportiva Ceuta, José Antonio Muñoz, con el presidente del Atlético de Ceuta, Pepe Gil, a su lado como mero observador.
Pero la tensión se desbordó cuando el citado José María Oliveira entró en escena mientras le replicaba a viva voz José Antonio Muñoz, aparentemente enfadado y encarándose con el máximo representante de la FFCE.
Muñoz aseguraba que la publicidad y el ambigú deberían de correr por cuenta del club mientras Oliviera le recordaba que él no era nadie ahí, ya que el que jugaba era el Atlético, y no la AD Ceuta.
Al final la Policía Nacional calmó los ánimos y el 'ambigú' continúo con sus puertas abiertas.