El Gobierno de Marruecos destacó este jueves los esfuerzos que despliega para frenar la emigración irregular y aseguró que ha abortado 30.000 intentos de emigrar hacia España en lo que va de este año.
"Este año se ha realizado un gran esfuerzo y los intentos abortados han superado los 30.000 en los primeros meses de este año", afirmó el ministro portavoz de Gobierno, Mustafa Jalfi, en una rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
Jalfi insistió en que los esfuerzos no estaban solo orientados hacia la lucha contra las redes de tráfico de emigrantes, sino también a aliviar el "impacto de la gran concentración que se ha producido en la ruta de Marruecos a España" el año pasado, tras el cierre de las otras vías del Mediterráneo, la de Libia a Italia y la de Grecia a Turquía.
El ministro marroquí añadió que los esfuerzos de su país en este ámbito implicaron la movilización de medios financieros y humanos, así como la adaptación a los cambios aplicados por las redes de emigración clandestina, que no solo operan en las costas mediterráneas sino también se han extendido hacia las costas atlánticas del sur.
Los esfuerzos de Marruecos "han supuesto un gran retroceso en cuanto a las llegadas a España", explicó el ministro, quien subrayó que varios países, ante todo España, han alabado la política migratoria de su país.
Además, Jalfi indicó que su país continúa con la puesta en marcha de los dispositivos del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular, y hoy mismo se reunirá el comité de lucha contra la trata de personas.
Durante 2018, las autoridades marroquíes abortaron 89.000 intentos de migración clandestina, casi todos por vía marítima, una cifra récord desde que se tiene registro de estas operaciones.