El presidente de la asociación, Antonio Sosa de Huro, explicó que vuelven a surgir problemas a la hora del cobro de la ayuda otorgada por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino a última hora: “El 90 por ciento de esa ayuda va a ir destinada a Melilla, que tiene un sólo barco, mientras en Ceuta hay cinco voraceros y nos quedamos prácticamente sin nada”.
Sosa de Huro volvió a achacar el desequilibrio a los problemas administrativos que suelen acompañar al sector en Ceuta, que depende de la Subdirección General de Pesca en Cádiz: “Suponemos que es por el desconocimiento que hay en Madrid de las condiciones que tenemos aquí. Nosotros normalmente tenemos falta de fondos para poder desplazarnos”. Las gestiones se reparten entre Madrid y Cádiz y en muchas ocasiones las ayudas o solicitudes se enfangan en los trámites administrativos. La Delegación del Gobierno se había comprometido con la Cofradía en facilitar la burocracía de los cobros y “están trabajando en ello”.
Otro de los problemas que señaló el presidente de la Cofradía de Pescadores del paro biológico de mes y medio es que las embarcaciones deportivas, que a veces suponen una verdadera competencia ya que a veces realizan capturas de envergadura comercial para conseguir un sobresueldo en el mercado, han continuado pescando: “Normalmente con un mes y medio de paro se debería notar en el estado de los caladeros pero el barco que salió ayer prácticamente volvió con las manos vacías porque han seguido explotándose”.