Las obras de la antigua Estación de Ferrocarril se encuentran ahora mismo paralizadas porque no tienen dirección facultativa. Según ha podido conocer esta redacción, el despacho de arquitectos de Madrid que es el responsable de esta dirección facultativa ha enviado un escrito al Ayuntamiento donde dan a conocer que dejan esta responsabilidad por distintas razones, entre las que se encuentra, por lo visto, el gran número de años que llevan con esta inversión y que no se ha encontrado un fin adecuado para el mismo.
Ante este problema que ahora mismo tiene en sus manos la Ciudad Autónoma, por lo visto, se está pendiente de la realización de una serie de informes jurídicos y técnicos, de los que algunos deberá realizar la propia Emvicesa. Recordemos que la relación que tiene la Empresa Municipal de la Vivienda con las obras de la antigua Estación de Ferrocarril se basan en que a principios del 2010, cuando fue a comenzarse la obra, se realizó una encomienda de gestión por parte de la Ciudad Autónoma a la empresa municipal para que ella llevara la responsabilidad. Todos sabemos como finalizó la situación, con una obra paralizada y que se ha tardado más de cinco años en reiniciarla. Muchos políticos siempre han comentado que la culpa de mala gestión se debió a quien entonces era el director gerente de Emvicesa, Antonio López, al igual que sucedió con las ARIS tanto de Santiago Apóstol y Los Rosales que se debieron ejecutar en los primeros años de esta década y que se ha tardado mucho tiempo tanto en adjudicar como en resolver, incluso con enfado por parte de Fomento que estuvo a punto de retirar la subvención que le correspondía.
Ante la situación con la que se encuentra la Ciudad Autónoma, con la obra paralizada como consecuencia de no existir dirección facultativa, lo que se está esperando es a que se terminen los informes antes mencionados, se ponga en contacto con el despacho de arquitectos para hacerles saber lo que ellos ya han cobrado tanto por parte de la Ciudad como de Emvicesa y a partir de ahí proponerles una salida. Si ellos persisten en mantenerse fuera de la dirección, se les pedirá que autoricen al arquitecto municipal, Javier Arnáiz, a que continúe, dado que es un profesional que ha estado muy cerca en esta citada inversión.
Recordemos que en la jornada de ayer, el líder de Caballas, Mohamed Alí, llegó a manifestar que se había cumplido el plazo de ejecución de esta obra, el cual era de cinco meses y que no se venía ningún avance sobre este particular, certificando que hacía 17 meses ya le propusieron al Gobierno en una sesión plenaria que resolvieran el contrato con la empresa Dragados que es la adjudicataria y que comenzaron un nuevo proceso de licitación. Una solución que, desde luego, nunca gustó al equipo de Gobierno.
Desde el mismo Ejecutivo se informa que hay un reconocimiento sobre que la obra no marcha al ritmo que se desearía por parte de la Ciudad, pero que por parte de la empresa Dragados se están presentando distintas certificaciones de unidades de obra que están avaladas con la firma de los técnicos y que determinadas construcciones se están haciendo fuera de Ceuta para luego ensamblarlas aquí.
Una inversión que no se consigue terminar Hace ya más de un año y medio que por parte de la Ciudad Autónoma se informó de que se habían iniciado gestiones con la empresa Dragados, que es la adjudicataria de la inversión en la antigua Estación de Ferrocarril, para que se reiniciaran las obras que habían estado paralizadas durante muchos años. Por supuesto, a los partidos de la oposición no les gustó para nada esta solución y apostaban por la rescisión.
En esas negociaciones con Dragados siempre se plantearon tres discordancias entre una parte y otra. En la primera de ellas, la más importante, la que se refería, desde luego, a daños y perjuicios que se habían detectado por parte de la empresa, la Ciudad siempre se negó. Se hablaba de unos 600.000 euros que al final, tanto una como otra parte, quedaron en someterse a un dictamen del Consejo de Estado que, al final dio la razón a la Ciudad Autónoma, quedando ese dinero, en la práctica, a una cantidad residual. Cuando por parte de la Ciudad se entendió que ya estaban informadas las tres discrepancias se firmó un decreto en agosto del año pasado por parte de la consejera de Economía, Hacienda, Administración Pública y Empleo, Susana Román, donde se indicaba que se le daba un mes de plazo a Dragados para que comenzara las obras. Las mismas, de manera oficial, se retoman en el mes de noviembre.
A pesar de ello, a lo largo de estos meses han sido numerosos los partidos de la oposición que han enviado notas a los medios de comunicación donde han denunciado que las obras estaban prácticamente paralizadas y no se estaba haciendo nada de nada.