La Consejería de Educación y Cultura ha fracasado en su empeño por pagar todas las becas extraordinarias, dieciocho, concedidas este año por un importe de 9.000 euros cada una para ayudar a otros tantos estudiantes universitarios ceutíes a sufragar su estancia fuera de la ciudad para cursar Estudios Superiores.
Según han explicado fuentes del Ejecutivo local, después de que en su primera edición solamente se concediesen nueve ayudas de esa naturaleza, para este curso se presupuestó el posible otorgamiento de un 50% más. Sin embargo, el número de universitarios que cumplían los requisitos para recibir esas ayudas se elevó hasta 18, con lo que el presupuesto reservado se quedó insuficiente.
Al comprobar esa circunstancia, la Consejería que dirige Javier Celaya intentó que ningún estudiante se quedas sin su beca aunque fuese suplementando la partida disponible con fondos de este ejercicio, pero el veredicto de la Intervención sobre ese planteamiento fue negativo por los reparos que pone el Tribunal de Cuentas a cualquier suplemento de créditos para una convocatoria cuando esta establece en sus bases que se concederá las que sea económicamente viable.
El impago de esta ayuda bloqueaba, a su vez, el de la ordinaria, que ahora la Consejería quiere pagar “cuanto antes” para perjudicar lo menos posible a los afectados.