La policía judicial de Marrakech ha remitido este martes a los involucrados en abusos a un niño de siete años al fiscal general del Tribunal de Apelación para que investigue los hechos.
"Esta brutal agresión sexual duró meses, durante los cuales los agresores amenazaron al pequeño y lo arrastraron hacia unas casas abandonadas en el distrito de Barima, lo que le provocó daños psicológicos y físicos como la introversión y orinarse involuntariamente", han señalado fuentes consultadas por el digital marroquí Hespress. Estos síntomas provocaron su traslado al hospital.
A través de una queja presentada, los servicios de seguridad comenzaron a investigar el caso. La víctima identificó a tres estudiantes por sus tarjetas escolares. Tres de ellos fueron arrestados de inmediato y se procedió a la búsqueda del resto. La policía pudo arrestar a otros siete adolescentes.