La ciudad autónoma se sumó ayer a la conmemoración del Día Mundial de Conciencia sobre el Autismo con el objetivo de poner de relieve la necesidad de contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas con trastorno del espectro del autismo (TEA) y promover su participación en todos los ámbitos de la sociedad como ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho.
Se trata de una reivindicación que toda la sociedad debería hacer suya como propia y para ello es necesario que se dé a conocer la realidad del colectivo y los talentos y capacidades de sus miembros más allá de tópicos y prejuicios.
“El autismo es una condición invisible”, lamentó ayer la presidenta de Autismo Ceuta, Rahma Er Ryfy, que subrayó que en España hay alrededor de 470.000 personas con TEA que “tienen mucho que aportar a la sociedad”, ya que “sus experiencias, talentos y capacidades son muy valiosas para todas las personas” mientras “también enfrentan grandes desafíos para participar en la sociedad en las mismas condiciones por las barreras que se encuentran en su día a día”.
En la disminución de esas dificultades deben centrarse las administraciones. Uno de los ámbitos más importantes para sembrar esa apuesta real por la igualdad de oportunidades es el escolar y ahí el esfuerzo realizado hasta ahora por el MEFPyD no ha sido suficiente para garantizar una inclusión real que tampoco es todavía un hecho en el conjunto de la visa social global, pero sí un objetivo común a compartir por todos.