El jefe superior de la Policía Nacional en Ceuta, Javier Daniel Nogueroles Alonso, tomó ayer posesión de su cargo. En su discurso, Nogueroles dijo sentirse como en casa en la ciudad, y así lo esperamos realmente, porque no es sencilla la labor que viene a desarrollar ni fácil la plaza en la que se torea. Y es que, aunque maravilloso, Ceuta es un territorio complicado para aquellos que se dedican a velar por la seguridad de los que conformamos la población.
Sin duda una gran responsabilidad la que asume y que hace, según sus propias palabras, con “ilusión y humildad”, también dos buenas actitudes para afrontar este gran reto.
Otro de los aspectos que destacó en su discurso es la importante situación geográfica de la ciudad, por ser la puerta que comunica a la Unión Europea con Marruecos. Una pieza imprescindible en el control de la delincuencia del Estrecho de Gibraltar. Un reto apasionante que requiere firmeza y fuerza en la toma de decisiones, que deseamos sirvan para conseguir grandes logros en todos los desempeños que se realicen bajo su mando.
Un gran esfuerzo en el que la organización y la gestión de los recursos será fundamental para acciones tan relevantes como el adecuado control del tránsito de personas y bienes a través del Tarajal cuando por fin se vuelva a abrir la frontera.
Bienvenido sea a Ceuta, donde la lista de cosas por hacer siempre va a ser extensa y donde sentirse realizado en materia de seguridad es complicado pero hacer el bien es más reconfortante aún si cabe que en otros destinos en los que la realidad no se muestra tan dura como lo hace en esta ciudad española.