El Gobierno central no prevé equipar a todas las unidades de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad con presencia en Ceuta con “chalecos salvavidas, boyas torpedo o latas de rescate acuático”, como propuso Ciudadanos al Ministerio del Interior después de que varios guardias civiles se jugasen la vida en primavera, concretamente el día 11 de abril, para sacar del agua en un tramo de costa cerca de Benzú a dos mujeres de origen subsahariano que, a primera hora de la mañana y en medio de un fuerte temporal, vieron zozobrar la embarcación en la que navegaban junto a otros seis hombres con destino a territorio español.
La formación naranja preguntó entonces a través del diputado en el Congreso Miguel Ángel Gutiérrez a la Administración General del Estado si pondría a disposición de policías y guardias “los materiales necesarios” para intervenir en casos de rescate acuático y “minimizar” riesgos para su integridad.
El Ejecutivo de la Nación ha contestado, en alusión a ‘Marsave’, que “anualmente y durante la temporada de verano” el Gobierno de la Ciudad Autónoma que preside Juan Vivas ha venido contratando “a una empresa de socorrismo que, en determinadas playas y durante un tiempo limitado, podría colaborar con la Guardia Civil en misiones de salvamento marítimo”.
Además, Interior tiene “la certeza” de que “llegado el caso, cualquier solicitud de apoyo, tanto de personal como de material de rescate marítimo que se realizara a la Asamblea Provincial de Cruz Roja en Ceuta, sería atendida de forma inmediata”.
Para finalizar, el Ministerio del Interior ha recordado que en la Comandancia de la Guardia Civil de Ceuta “existe un Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) y un Servicio Marítimo Provincial dotados de determinados medios de salvamento marítimo que, hasta el momento, han permitido atender de forma eficaz las incidencias en las que han participado”.
La iniciativa de Ciudadanos partía de que “Ceuta recibe casi a diario embarcaciones llenas de mujeres, en ocasiones embarazadas, hombres y niños que muchas veces se encuentran en condiciones poco saludables tras el largo camino que han tenido que recorrer desde sus países de origen en lanchas a motor, botes o embarcaciones sin ningún tipo de seguridad se lanzan se exponen a perecer ahogados y las Fuerzas de Seguridad se ven implicadas de forma habitual en operaciones de rescate que ponen en riesgo su vida y su integridad física”.