Los trabajadores que no renovarán su contrato pasan de 30 ó 40 efectivos a “menos de diez”.
Fernando Pérez-Padilla, director territorial del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), salió ayer al paso de las informaciones difundidas por los sindicatos sobre las decenas de “cancelaciones de contratos” que se están produciendo en Atención Primaria y Especializada tras la resolución del proceso selectivo de promoción interna para acceso a la condición de personal estatutario fijo.
Los sindicatos, en especial la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO, que lleva meses hablando de las consecuencias positivas de la Oferta Pública de Empleo (OPE) pero también alertando de las negativas, denunciaron la semana pasada que se trata de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) encubierto, “a pesar de la falta de personal que padece la plantilla por el sobreesfuerzo y el usuario como destinatario de esta asistencia”.
Los representantes de los trabajadores sostienen que aquellos sustitutos que ocupan las plazas de compañeros que ahora obtienen la suya en una categoría superior a través de la promoción interna –por ejemplo, de auxiliar a enfermero–, están acabando en la calle al ver finalizados sus contratos y temen que dichas plazas se amorticen, es decir, queden sin contratarse hasta que desaparezcan de la plantilla orgánica.
“Con un sueldo no se puede cubrir ambas plazas”, explicó Pérez-Padilla; “en esta situación había muchas personas y los sindicatos, lo que temen, es que esas 30 ó 40 plazas que se están sustituyendo se pierdan y que, de alguna manera, se estaban cubriendo con un dinero que no existía, lo cual ha originado una desviación del gasto”. Para paliar esta situación “anómala”, como la definió el máximo representante de Ingesa en la ciudad, la Dirección Territorial ha diseñado una ‘hoja de ruta’ para “minimizar dentro de lo posible” el impacto de la promoción interna en este colectivo mediante reubicaciones. “Ingesa está realizando un esfuerzo importante para que permanezcan con nosotros”, añadió.
La idea de Pérez-Padilla consiste en dar oportunidad a esos profesionales de seguir en Ingesa sin cambiar nada de las bases, es decir, con la publicación de la bolsa de trabajo ya que, de lo contrario, se favorece a unas personas sobre otras y se incurriría en una irregularidad, expuso el director territorial. “Pero como coincide que son los primeros en la bolsa, se les va a dar una continuidad de manera que, en vez de 30 ó 40 efectivos que puedan quedarse en el paro, van a ser cinco personas o diez como máximo”, indicó el portavoz de la sanidad asistencial en la ciudad.
Las personas que realizan en la actualidad esas sustituciones seguirán siempre que les corresponda, es decir, que accederán a los puestos aquellas que reúnan la cualificación y los méritos para esos empleos, “aunque no tienen que ser rigurosamente los que están”. Sin embargo, prosiguió, “como esos trabajadores llevan muchos años, son los que están los primeros, con lo cual, lo normal es que continúen ellos”.
Por tanto, aclaró Pérez-Padilla, las plazas de origen cubiertas por sustituciones “no van a desaparecer, en principio se van a conservar”. El máximo representante de esta administración sanitaria puntualizó que, hasta hace unos días, solo una persona se había quedado sin empleo.
¿Cuánto tiempo pasará hasta que vuelvan a ser contratados por Ingesa? “De hecho, ya se están contratando. Ahora mismo, algunas se han cubierto pero la mayoría de esta problemática, a medida que se incorporen los titulares, se solicitarán a Madrid las autorizaciones para ir cubriendo”, destacó el responsable de la Dirección Territorial.
El portavoz del Área Sanitaria local admitió la denuncia pública de los sindicatos por la cual había decenas de personas que quedaban en desempleo ya que, los que han promocionado y aprobado, abandonan su categoría para ascender y, por eso, al asignarse el presupuesto a su plaza, la del sustituto se queda sin presupuesto y no se podría cubrir.
Por su parte, CCOO insistió ayer en que decenas de plazas se encuentran en el disparadero y lamentó que José Julián Díaz Melguizo, director general del Ingesa en Madrid, evitara comunicarles qué ocurriría con ese sector de la plantilla. Ángel Lara, secretario general de la Federación comisionista de Sanidad y Sectores Sociosanitarios, criticó que la Administración deja en la calle a profesionales que llevan diez años al servicio de la sanidad local; han realizado un gran esfuerzo por la población mientras han prestado servicio y tienen cargas familiares.
Los sindicatos calculan que hay 20 personas que ya están en la calle
Ángel Lara, secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO, estimó que una veintena de contratos del Ingesa en diversas categorías ya han finalizado y, avanzó, el mayor grupo será el de los auxiliares de enfermería con 12 ó 14 efectivos. El Boletín Oficial del Estado (BOE) ya ha publicado los nombramientos de los profesionales que han prosperado en la promoción interna en categorías tales como técnicos de laboratorio, celadores y auxiliares administrativos, enumeró el comisionista. Por su parte, Elisabeth Muñoz, secretaria general del Sindicato de Enfermería, SATSE, destacó la “coherencia sindical” de su central y el resto que integran la Junta de Personal al cumplir con todos los trámites –incluido la presentación por escrito– ante la Gerencia Única, la Dirección Territorial, la Delegación del Gobierno y la Ciudad Autónoma, “quienes han desatendido nuestras solicitudes de reunión”. “Nos obligan a recurrir a instancias judiciales ante la falta de respuesta a nuestras solicitudes de información sobre la plantilla orgánica que impide que podamos defender los derechos de los trabajadores”, explicó la también presidenta de la Junta de Personal, quien recordó que la última que tienen es de 2011.
