“Pasa la vida…igual que pasa la corriente cuando el río busca el mar”. Mientras tanto, hay personas de bien con las que has convivido de las que no te puedes olvidar por mucho que camines a donde te lleve el destino.
También “pasa la gloria y nos ciega la soberbia” y “ver que de tu obra ya no queda ni la memoria”: Estas letras de afecto intentan de todo corazón que quede algo de tus hechos a lo largo de tu vida para que se te conozca un poco.
Para ello, recogemos algunos comentarios sobre tu persona aparecidos en las redes sociales: “El dolor que sentimos por tu marcha… nos hace sentir una profunda tristeza, mitigada con la fortuna de haberte conocido”. “Un buen hombre…”. “ Un gran amigo y compañero… una buena persona siempre alegre y humorista…”. “Portero, entrenador, maestro y director. Caballero, elegante, presumido y seductor. Bromista, positivo, reservado y huevón. Alegre, despistado, generoso con un gran corazón”. “Sí, de las pocas personas… de gran bondad que he conocido en Marruecos trabajando yo de profesora como interina…”. “Gran persona y gran maestro. Siempre estarás en el recuerdo de quienes fuimos tus compañeros…”.
Desde tu infancia en Maestranza, donde fuiste a la escuela, a la iglesia del Valle en donde te casaste, y empezaste a practicar el fútbol con pasión, fuiste sembrando amistades por doquier en tu ciudad, recogiendo frutos ciertos por tu trato afable y simpatía natural.
Tu breve trayectoria futbolística te marcó profundamente. Desde el C.D. Puerto, Fundador, Real Madrid (juveniles), Plasencia, Lérida, U.A. Ceutí, O´Donnell, queda en el recuerdo de la vieja afición caballa, que por aquellas fechas de finales de los años sesenta y comienzos de los setenta del siglo pasado, llenaban los domingos las gradas del “Campo del 54” y del “Alfonso Murube”.
Tu dedicación y entusiasmo al magisterio durante cuarenta y cinco años fueron testigos de tu entrega a los demás sin tapujos: Puerto de Santa María, Chiclana, Tánger, El Aaiún, Tetuán y Ceuta, llevan a un sinfín de personas de toda índole y condición a dirigirse a tu familia a través de sus condolencias sinceras y grandes muestras de cariño verdadero.
En suma, un hijo de Ceuta sencillo y bueno que en su hora final, queremos considerarlo en su justa medida y tenerlo grabado en el alma y en la memoria.
¡Descanse en paz!
Lo siento mucho. Mis condolencias para Reme y para ti. Descanse en paz.
DESCANSA EN PAZ😥😥😥.
Descansa en Paz maestro, amigo
Descansa en Paz, mi buen amigo.