¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? Javier Guerrero ha citado este viernes a última hora de la tarde a algunos medios, no a este, ante
la Jefatura Superior de la Policía Nacional de Ceuta para, contrito como Mourinho, denunciar que sigue siendo víctima de una persecución de los poderes fácticos que busca destruirle. No sólo políticamente. A su juicio hay algunos que quieren verle
“en Santa Catalina” y todo, intuye, porque ha montado un partido político, algunas encuestas le dan representatividad en la Asamblea y la gente de Ceuta “me quiere”. Según ha dicho, en horas o días iba a aparecer en algún medio “un nuevo ataque”
sobre su forma de relacionarse con “los menas”, una “corruptela” que se asentaría en ofrecer y “prometer” a algunos menores “traslados a la península” a cambio de “que me denuncien”. Rodeado por parte de su equipo, Guerrero ha anunciado una ola de denuncias de trabajadores de los Centros de Menores y otras personas que estarían dispuestas a afirmar ante la Policía y la Justicia que “los responsables
de 'La Esperanza' están coaccionando a niños migrantes solos para que le señalen como autor de presuntos delitos “que no se pueden decir”.
“Me está costando mucho voy a seguir adelante, no tengo nada que ocultar, no me avergüenzo de nada, tengo la conciencia muy tranquila y nada que ocultar. Este es un trabajo de desprestigio, se miente mucho, se ha hecho un escrito antes, no tengo nada prohibido”, ha aseverado el exconsejero, que ha afirmado que fue él quien “rompió” su relación con el Área de Menores y que por eso no puede entrar en los centros desde enero, como informó este periódico. “No quieren que me presente, pero el pueblo está a mi favor, no sé por qué me quieren destruir con tanta mentira, quieren acabar conmigo”, ha proseguido Guerrero, quien ha insistido sin dar más detalles que “en los próximos días van a llegar cosas contra mi persona que traspasan límites morales, dejando al descubierto la indignidad que rodea a los poderes fácticos de esta ciudad”.
"Os gusta seguir removiendo todo"
El médico se ve una víctima: “A la política y a los periodistas os gusta seguir removiendo todo”, ha lamentado sobre un colectivo al que ha señalado por estar “muy bien pagado por la Ciudad”. “Ven peligrar su cortijo de clientelismo, matonismo y sobornos y se me ha filtrado que la campaña contra mi persona aumentará su nivel de brutalidad e indecencia pese a que la Justicia y la sociedad ceutí ya ha descartado de forma tajante algunos temas”, ha alertado. “Van a declarar testigos que saben la verdad, que han visto lo que han hecho con los menores, cómo los han coaccionado y extorsionado, y lo van a decir: trabajadores, testigos y si hace falta traeré a los menores, que están dispuestos a venir a declarar, y entonces se sabrá mucho de lo que he descubierto: ciertos tratos, ciertas actitudes, cómo se les ha tratado... Es muy serio y quieren un chivo expiatorio que debo ser yo”, ha relatado sobre los “movimientos mafiosos e indecentes” que supuestamente le acechan.
“Pienso llegar hasta el final caiga quien caiga… Por qué, por qué… ¿Porque he sacado un partido político? ¿Porque las encuestas me dan? ¿Porque el pueblo me quiere? ¿Por qué? Espero que el pueblo responda en las urnas”, ha apelado al electorado antes de “avisar” a los medios de que “no me temblará la mano porque la verdad es lo más importante y mi conciencia es mi vida”. “Nadie puede entrar en los centros de menores, pero no tengo ningún escrito donde lo diga, solo tengo los Whatsapps con la señora, no señora, Palomo, en los que yo rompí la relación”, ha rememorado Guerrero, que dice lo que dejó “porque no estaba contento con todo lo que veía”.
El líder de Ceuta Avanza ha mentido al afirmar que este medio y elDiario.es no le dieron la oportunidad, tanto antes como después de publicar la información
sobre su prohibición de acceso a los centros, de dar su versión. Preguntado por si sigue recibiendo a menores solos en el Hospital ha dicho que ha atendido a “un chico diabético en malas condiciones” que fue “con la puerta abierta, enfermos al lado y el enfermero de ‘La Esperanza’ conmigo”. Guerrero ha negado que el Ingesa le haya abierto un expediente por su forma de desenvolverse
en el clínico de Loma Colmenar con los menores migrantes solos. “Es mentira, aunque usted esté contento, pero ya hablaremos, esto no terminará aquí”, ha asegurado antes de augurar que también solicitará “medidas cautelares” que no ha precisado contra personas como el director de ‘La Esperanza’.