Las Murallas Reales han acogido la tarde de este martes la graduación del Centro Integrado Público de Formación Profesional nº 1 de Ceuta, que además de celebrar a los alumnos también ha servido para rendir un merecido homenaje a una querida trabajadora que, tras casi dos décadas de servicio en la institución, se despide de todos deseándoles lo mejor.
El inicio de la actividad ha sido con un vídeo. Un audiovisual presentando al centro ha sido lo que le ha dado al bienvenida a aquellos que se han congregado en este gran espacio para festejar este importante momento para los más de cien protagonistas.
Y es que 150 alumnos, divididos en Formación Profesional Grado Básico, Grado Medio y Grado Superior, cada uno con sus respectivos ciclos de Informática, Comercio y Administración, han cumplido una meta muy importante que los llevará a otros tantos logros a lo largo del largo y provechoso camino que les queda todavía por recorrer.
Durante el acto también han querido apartar un momento para hacer mención a aquellos estudiantes, específicamente a 18 de ellos, que han participado en el programa Erasmus. La institución ha querido destacar su aporte.
Pero, seguramente todos han coincidido en que uno de los momentos más significativos de este acto ha sido cuando han reconocido la labor de una trabajadora muy apreciada en el Centro Integrado Público de Formación Profesional nº 1 . No han querido pasar por alto esos 17 años de labores que Rachida Mohamed le ha dedicado a la institución velando siempre por la limpieza y el mantenimiento del lugar.
Otro de los instantes que más emociones ha generado ha sido, por supuesto, la imposición de las bandas. Cada grupo, Formación Profesional Grado Básico, Grado Medio y Grado Superior, han pasado al frente para recibir lo que tanto esfuerzo y dedicación les ha costado y que ahora les ha dibujado una gran sonrisa.