Continuando con su línea de derribos de edificaciones ilegales comenzado por la Consejería de Fomento hace unos meses, ayer le tocaba el turno a un establecimiento dedicado a la venta de bocadillos ubicado en la zona del Mixto y que había sido motivo de queja por algunos vecinos de la zona. A primera hora de la mañana, técnicos de la Consejería de Fomento daban órdenes de iniciar las tareas de derribo de la construcción, tras una tramitación que culminaba en un expediente disciplinario después de que los propietarios solicitaran una reforma que fue denegada por el área competente.
Con esta actuación, se da un paso más en la erradicación de construcciones ilegales que existen por toda la ciudad, aunque las zonas más problemáticas se concentran en zonas como el Príncipe, concretamente en la calle Fuerte y en el puente del Quemadero, o Poblado Legionario, donde, pese al alto número de edificaciones en situación irregular, aún no se ha actuado con la suficiente contundencia para erradicar este problema.
Quejas vecinales
Por otra parte, alguno de los últimos derribos acometidos en el Príncipe ha dejado como consecuencia las quejas de los vecinos residentes en varios edificios colindantes de la zona. Es el caso de una demolición que afectó seriamente a los inmuebles habitados de los alrededores, ya que su derribo empeoró las grietas ya existentes en las viviendas, con el consiguiente peligro de derrumbe. La falta de previsión a la hora de ejecutar esta actuación ha generado un gran malestar entre los vecinos que han solicitado que la Ciudad adopte las medidas necesarias para salvaguardar su integridad física.
Recordar que muchas de estas edificaciones ilegales impiden el normal desarrollo de las obras de infraestructura que se acometen en barriadas como el Príncipe, y desde Fomento anunciaban su intención de analizar la posible regularización de las mismas.
Por otra parte, en zonas como Pasaje Recreo se han iniciado expedientes de ejecución subsidiaria, al haberse comprobado el inicio de obras que carecen de licencia.