Se le conoce como estafa CEO y es una modalidad de engaño telefónico que tiene como principal víctima a las empresas. La Jefatura Superior de la Policía Nacional de Ceuta ha advertido de cómo los delincuentes intentan que de forma apresurada les hagan transferencias de dinero a una cuenta de su poder.
Previamente estudian a la empresa con el fin de obtener datos sobre responsables y las actividades que llevan a cabo. Normalmente llaman por teléfono a la empresa, aunque a veces lo hacen a través de correo electrónico y casi siempre aprovechando el horario de cierre.
Para no crear sospechas se hacen pasar por directivos de las empresas en el caso de las grandes o en las PYMES o como responsables de empresas directamente relacionadas con la que quieren estafar (proveedores, administradores, gestores, etc.).
A través del uso de la ingeniería social, transmiten una sensación de urgencia para incitar al empleado a que actúe rápidamente haciendo la menor cantidad de preguntas posibles. Normalmente informan que tiene que realizar una transferencia urgente, debido a que un pedido de mercancía se encuentra paralizado, simulando tener a la otra línea a un responsable de la empresa objeto de la estafa, aportando los datos de esta para dar credibilidad a la misma. A su vez manifiestan tener en espera igualmente a un responsable de la empresa de paquetería, solicitando que no cuelgue debido a la importancia del asunto y así de esta forma crean un momento de estrés para que no llegue a asimilar lo que le están solicitando.
De esta forma, consiguen que por parte del empleado se realice una transferencia de dinero generalmente a través de empresas de dinero y con destino al extranjero.
Actúan a las horas de cierre de las empresas generando situaciones de estrés
Cuando el empleado de la empresa estafada asimila los hechos y consulta con el verdadero responsable de la empresa para verificar los hechos ya no hay vuelta atrás porque el perjuicio económico se ha llevado a cabo.
Por parte de la Jefatura superior se recomienda llevar a cabo determinadas pautas en este tipo de estafas, como son crear un protocolo de transacciones financieras claro y conciso dentro de las empresas; establecer una regla para realizar cualquier transferencia que exija al menos la aprobación de al menos dos personas autorizadas; no sucumbir a presiones y a sentidos de urgencia; verificar cuidadosamente detalles como nombres y direcciones de las empresas o, en el caso de que la comunicación se realice por correo electrónico, no responder a correos de apariencia sospechosa.
En el caso de haber sido objeto de este tipo de estafa es importante conservar toda la documentación, anotar teléfonos y todos los datos que pudieran ser relevantes para una futura investigación.