Los sanitarios que atendieron a la embarazada en el Polígono Virgen de África indican que es un caso “excepcional” ya que suelen tener tiempo para su traslado al hospital.
El centro coordinador del 061 recibió en la noche del lunes el aviso de una embarazada que solicitaba la atención de equipo de emergencias porque había roto aguas y se encontraba en la fase expulsiva, es decir, la cabeza del bebé comenzaba a coronar la vagina de su madre.
Inmediatamente, la unidad de servicio activó los protocolos y se desplazó hasta un domicilio del Polígono Virgen de África, donde localizaron a la parturienta en las escaleras del edificio junto a algunos miembros de su entorno. Agentes de la Policía Local ya se habían personado en el edificio donde esperaban la llegada de los sanitarios.
Una vez trasladada a la ambulancia y tras proceder a la exploración pertinente, el parto se aceleró y los efectivos tuvieron que atender a la mujer ‘in situ’. Afortunadamente, recordó Pascual Brieba, enfermero del 061 que intervino en esta urgencia, recibió la formación adecuada para resolver este tipo de casos en el curso titulado ‘Atención inicial al parto extrahospitalario’ del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Ingesa.
“Todo se desarrolló dentro de lo esperado”, señaló Brieba, quien apuntó a que el bebé sólo presentaba una vuelta de cordón y aplicaron las técnicas aprendidas durante la formación impartido por las matronas Luciano Rodríguez y Juana Vázquez en la primera edición del curso que organizan.
Brieba reconoció que es frecuente realizar salidas para atender a mujeres que van a dar a luz, sin embargo, este caso es “excepcional” porque el proceso de expulsión ya había comenzado. “Es el segundo caso que atiendo en más de dos años”, señaló el enfermero, quien subrayó que el servicio prestado en esta ocasión ha sido más completo que entonces. Aprovechó para agradecer los conocimientos adquiridos en el curso de parto extrahospitalario. “Nos han dado un grado de seguridad”, concluyó.
En cuanto a las llamadas realizadas por la Policía Nacional o la Guardia Civil desde la frontera, explicó Brieba, éstas son habituales. “Rompen aguas en Tetuán o Castillejos y pasa bastante tiempo hasta que llegan a la ciudad”, señaló este componente del equipo del 061, para aclarar que normalmente son trasladadas al hospital y no es necesario utilizar las técnicas para la asistencia de parturientas ya que son atendidas por las matronas cuando ingresan en el hospital.