Ayer se celebró el XXXII aniversario de la aprobación de la Constitución española en referendum por todos los ciudadanos de nuestro país. En estos más de seis lustros, la Carta Magna se ha convertido en la referencia de la democracia española y del consenso entre todas las fuerzas políticas cuando se ha buscado el entendimiento por encima de los intereses partidistas. Quienes tuvieron el gran honor de redactar nuestra Carga Magna hicieron una gran labor de enterrar las dos Españas y de continuar de la mano para fortalecer una democracia que, por supuesto, a lo largo de todos estos años también ha tenido sus momentos de peligro. Hoy nadie podría plantearse una España distinta, pero es cierto que fue la llave de la fórmula mágica que nos permitió incorporarnos a un mundo moderno y que ha protagonizado los años de mayor avance social, político y económico de toda nuestra vida como Nación. Su vigencia sigue latente cada día entre todos nosotros.