La vida de Drogo ha cambiado por completo. Su futuro visualizado en un chenil del centro zoosanitario, la antigua perrera, dio un giro radical cuando el Servicio Cinológico de la Guardia Civil de Ceuta se fijo en él.
Buen ojo tuvieron los agentes, porque este perro pastor belga malinois promete ser un gran fichaje. Con un año y dos meses, Drogo aprende rápido en su función de detección de personas.
El cabo primero y jefe del Grupo Cinológico, Jesús Álvarez, cuenta la historia de quien es el tercer perro que el Instituto Armado libera del abandono en nuestra ciudad para darle un futuro entre sus filas.
“Lo sacamos del núcleo zoosanitario, lo que coloquialmente se conoce como la perrera. Hay muchos perritos en ese lugar y vimos que le podíamos dar una nueva vida a un animal, siempre y cuando cumpliera unos requisitos. Vimos a Drogo y nos encantó porque morfológicamente es un perro apto, es súper fuerte, se mueve bien y de una raza archiconocida como el pastor belga malinois que es el perro policía por excelencia hoy en día tanto en España como en el resto de Europa”, explica a FaroTV.
“Este concretamente lo vamos a probar para detección de personas, para su búsqueda y de momento va bien. Creo que ya mismo le daremos el uniforme”.
El Servicio Cinológico de la Guardia Civil se erige en un auténtico quebradero de cabeza para aquellos que quieren burlar la ley. A los guías se les suman los canes especializados en la lucha contra el tráfico de drogas, explosivos o la inmigración ilegal. La combinación entre todos los agentes es la clave de los buenos resultados que se obtienen en el puerto de Ceuta.
Drogo deja atrás una vida que desgraciadamente marca a muchos otros canes, la del abandono. Su raza, malinois, es una de las que más lo está sufriendo.
“Este es un perro de tantos que hay en el centro zoosanitario, que desgraciadamente hay muchos. Son de abandonos, crías indiscriminadas que luego acaban para fines que no son nada propios... A Drogo lo tenían ahí, no recuerdo bien el motivo, pero nos gustó y aquí está con nosotros”.
"De momento va bien, creo que ya mismo le daremos el uniforme", explica Álvarez
Para la Guardia Civil poder dar una segunda vida o mejor dicho una auténtica vida a estos canes es positivo. Hay buena cantera dispuesta a reforzar la plantilla del Instituto Armado tan necesaria en un puerto que se presenta como el trampolín pretendido por las redes de delincuentes para traficar.
“Es una oportunidad que creemos que a nosotros nos viene bien como al animal, ya que es una garantía porque le estás ofreciendo una vida y unos cuidados. Además todo lo que sea sacar animales de ese entorno es beneficioso”, detalla.
Drogo está llevando a cabo una formación de diez, sus cualidades apuntan a que será un auténtico líder a la hora de evitar la introducción irregular de personas. Un servicio clave en el que la rapidez se traduce en salvar vidas. La formación que desarrollan los guías caninos se orienta siempre a sacar lo mejor de fichajes como Drogo comenzando por algo tan básico como crear un vínculo.
El agente Álvarez tiene claro lo que vale Drogo.
“Primeramente lo que intentamos hacer es que el compañero que lo tenga adjudicado cree un vínculo fuerte con él. A priori se evita todo tipo de adiestramiento y nos centramos en ese vínculo, en darle cariño y roce para que el perro se vaya haciendo a ti. Y ya cuando ves que lo tienes contigo es cuando empezamos el periodo de formación y a asociar olores dependiendo de lo que queramos enseñar”.
“Cualidades tiene para todo este perro. Sí es cierto que tiene muy acentuado el tema del ladrido y hemos querido aprovechar esa cosa innata que tiene para beneficio nuestro. Como la detección de la localización de personas es activa y se fundamenta una vez que encuentras a la persona en que se empieza a ladrar hasta que venga tu guía a premiarte... pues pensamos aprovechar eso que el perro tiene innato para fomentarlo y conseguir esa ventaja. Nos va a costar mucho menos trabajo sacarle a este perro esta detección que a cualquier otro que le cueste más ladrar”, detalla.
Drogo pasa a formar parte de la familia de la Benemérita, deja atrás el abandono, otra vida que desgraciadamente sufren muchos perros en Ceuta. Tiene por delante un futuro, mucho que demostrar y un papel que cumplir. Como Álvarez reconoce: todos forman parte de la misma familia.
En el Cinológico, adelantados a la Ley de Bienestar Animal
El Servicio Cinológico de la Guardia Civil tiene entre 20 y 25 canes a su cargo dependiendo de las comisiones y refuerzos que haya. Esto de la nueva Ley de Bienestar Animal de la que tanto se habla y escribe no es nuevo en el seno del Instituto Armado en el que se sabe a la perfección cómo hay que tratar y cuidar a quien es un compañero más.
“Haciendo gala de la nueva Ley de Bienestar Animal, nosotros siempre hemos ido un paso más y siempre hemos cumplido con esa ley. Quiero decir que cuidados, mimos y necesidades de traslados siempre lo hemos intentado llevar a rajatabla. Para nosotros esa ley no es nada nuevo, ya contábamos con esos conocimientos y ese proceder con ellos”.
Los canes especialistas del Servicio Cinológico son atendidos como miembros del Cuerpo y la relación que sus guías mantienen con ellos llega al punto de considerarlos miembros de su propia familia. Pueden llevarlos a sus hogares y la relación que se fragua entre ambos es tan fuerte que el vínculo resulta especial.