La Guardia Civil ha detenido al patrón de una moto de agua después de protagonizar una persecución que culminó con la embarcación abandonada en la playa de Alfau, bajo la sorpresa de los bañistas. Por estos hechos ha sido acusado de un delito de desobediencia.
Según ha podido saber El Faro, tras el abandono de la moto acuática se comenzó una investigación para dar con el patrón que la gobernada, siendo detenido y llevado a las dependencias del Instituto Armado.
Tras la detención, se pudo comprobar que el patrón ni siquiera era el propietario de la moto de agua, sino que era de un tercero que ya ha solicitado su devolución. Aunque la moto fue llevada a las dependencias de la Guardia Civil, será devuelta a su propietario original.
Mismo caso
Se trata del segundo caso esta semana, ya que el pasado martes, otro hombre fue detenido por el Servicio Marítimo en las mismas circunstancias y acusado igualmente de desobediencia al no hacer caso a los agentes que le indicaron que detuviese la embarcación.
Los hechos sucedieron en mitad de un operativo de búsqueda, cuando la Guardia Civil buscaba a los responsables de un pase de inmigrantes, pero se toparon con esta persona que tras solicitarle que se detuviese, salió a la huida.
Una vez que llegó al puerto pesquero intentó marcharse con celeridad, peor al despertar sospechas fue retenido en las instalaciones de la Compañía Fiscal. Tras pasar a disposición judicial, fue condenado por un delito de desobediencia por el cual deberá pagar una multa de 3.600 euros.
Motos de terceros
En este tipo de casos coincide que los patrones de las embarcaciones que finalmente son detenidos ni siquiera son los titulares de la embarcación, sino que además de desobedecer a la Guardia Civil, lo hace con motos acuáticas que no son de su propiedad, pero que luego dejan abandonadas.
Gentuza es lo que son. Y dicen que buscan vida... ??