Un año,
6 meses y 3 días de prisión. Esa es la pena a la que ha sido condenado el conductor del
vehículo que se dio a la fuga en la noche de este martes tras toparse con un control de la UIP desarrollado en la barriada del Príncipe Alfonso, en concreto en la
calle de San Daniel. Tal y como han explicado fuentes judiciales a El Faro de Ceuta, la pena se sustituye por cinco años de expulsión del territorio nacional. Una condena acordada entre las partes tras el reconocimiento de la comisión de un delito de atentado.
La Policía detuvo a dos personas; respecto del conductor se acordó esta condena, con la advertencia de que si no cumple la medida impuesta de prohibición de entrada en territorio nacional, acatará la medida de privación de libertad señalada. Respecto del copiloto, se ha sobreseído el caso, sin imponer sanción alguna. A pesar de que la Jefatura Superior comunicó que los dos detenidos lo habían sido por homicidio en grado de tentativa y atentado contra agentes, la condena se ha ceñido a este último delito que es el que se ha reconocido y constatado. De hecho ni siquiera hubo reconocimiento por parte del médico forense a los agentes al no haber lesiones entre los
policías que conformaban dicho control. Los dos ocupantes del coche se detuvieron al comprobar la existencia del control,
dándose a la fuga a la carrera y dejando el vehículo abandonado en la vía pública. El conductor aceleró bruscamente y a gran velocidad adoptando un comportamiento “temerario” hacia la integridad de los agentes, indicó en una nota la Jefatura Superior. El ahora condenado se presentó por sus propios medios en la Jefatura, confesándose ser el conductor del coche. Se encontraba en Ceuta de manera irregular, acordándose por lo tanto su expulsión.