El día 15 de este mes de septiembre habrías cumplido 100 años. Llegaste hasta los 95 y llevaste una vida plena y feliz.
Siempre te recuerdo amable y discreta, y muy solidaria. Te preocupaba el prójimo y hacías todo lo posible para que las personas estuvieran a gusto y felices a tu lado.
Siempre fuiste una persona luchadora, amante de la justicia y esto lo trasmitías a quienes te rodeaban. Estaban continuamente aprendiendo y te superabas cada día. Te gustaba escribir sobre todo tocabas temas de denuncia social; también escribías poesías y artículos en defensa de los animales. En 1982 fuiste una de las cuatro personas que fundaron la “Asociación Protectora de Animales y Plantas”. Ellos fueron Dorita, África Aguilar, Kiko y tú. Trabajabais con ahinco y cariño en sacar la Protectora adelante. A ti te quisieron elegir como Presidenta de la Asociación, pero tu respuesta fue que preferías ser socio por las casas o en la calle o recoger alimentos para los animales en algunos cuarteles; yo te acompañaba muchas veces.
Fuiste una adelantada a tu época pues cuando murió papá, lo primero que dijiste fue que querías volver a trabajar en Intendencia, como así fue; también te sacaste el carnet de conducir animándome a mi a hacerlo también.
Eterna estudiante, no pudiste estudiar por causa de la guerra pero me contabas que por las noches te ponías a leer y estudiar pensando que realmente estudiabas Magisterio que es lo que te gustaba. A mi hermano y a mi nos ayudaste mucho en los estudios y disfrutabas haciéndolo con nosotros.
En fin, podría contar más cosas de ti pero me quedaría corta. Sólo decir que fuiste una MADRE ejemplar, culta y amante de la VIDA. Por eso te quiero recordar tal como eras y así lo hago cada día. Desde donde estés estoy segura de que nos proteges y llenas nuestra VIDA de bellos y entrañables recuerdos.
Te quiere, tu hija Hermy.