La Ciudad Autónoma de Ceuta prevé pedir esta semana formalmente a través de Acemsa a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente la constitución de una comisión tripartita en la que ambas administraciones se reúnan con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) para acordar la cesión de uso a la administración local de los pantanos del Infierno y el Renegado.
Esta se considera la vía más ágil para consumar el objetivo, ya que la transferencia de los mismos exigiría “años”.
La Ciudad considera que tomar directamente las riendas de los embalses, como ya se ha hecho, por ejemplo, con la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP), permitiría a Acemsa convertirse de hecho en el organismo de cuenca y hacerse cargo de todo el sistema hídrico-hidrológico de Ceuta.
Al organismo de cuenca le compete, en cada territorio, “la elaboración del plan hidrológico de cuenca, así como su seguimiento y revisión”; la administración y control del dominio público hidráulico (incluido el informe vinculante del planeamiento cuando afecta a las zonas de protección fluvial o prevé aumento de demanda de recursos hídricos); y la gestión de los aprovechamientos de interés general o que afecten a más de una autonomía.
Actualmente la administración autonómica desembolsa cerca de un millón de euros al año en concepto de canon y el papel de la CHG ha quedado reducido, según las fuentes consultadas, a “un sinsentido burocrático y una anomalía” en comparación con el resto de territorios del país.
Sin apenas inversiones, lo sucedido con los senderos que rodean los embalses durante los últimos años, cuando permanecieron cerrados por la falta de acuerdo sobre qué parte debía hacerse cargo del desembolso necesario para acondicionarlos, es un ejemplo de las disfunciones que acarrea el actual esquema de funcionamiento.
En él la Confederación tiene la última palabra para cualquier cosa (aún no ha respondido a si se podrían poner paneles solares sobre la lámina de agua, por ejemplo), pero es la Ciudad la que asume la mayoría de los costes que se generan.
Eso sería una buena noticia, darle utilidad a los senderos de los pantanos y poder disfrutar de los entornos, pero la CHG los tienen cerrados caprichosamente.