Ceuta se prepara para seguir la senda por la que ya transitan autonomías como el País Vasco, Madrid o Navarra, las primeras en introducir los contenedores marrones en sus calles, para mejorar la red de reciclaje de residuos con depósitos específicos para residuos orgánicos como restos de fruta, verdura, carne y pescado; cáscaras de huevo, marisco y frutos secos; otros restos de comida; restos de infusiones y posos de café; papel de cocina sucio y servilletas usadas; papel y cartón sucios de aceite; y pequeños restos de jardinería, plantas, hojarasca y flores.
La Consejería de Medio Ambiente dispondrá de algo más de 1,7 millones para facilitar a empresas y ciudadanía dar un paso más en ese sentido este año, según ha precisado el director general Alfonso Conejo. El contenedor marrón redirigirá los restos orgánicos que componen, según las estadísticas disponibles, el 37% de la basura diaria (170 kilos de desechos anuales por habitante), que con el tratamiento adecuado puede convertirse en abono, fertilizante o biogás.
En la mayor parte de España los biorresiduos acaban todavía, como en Ceuta, en el contenedor gris mezclados con otros materiales contaminantes y no biodegradables, con lo que las posibilidades de extraer valor de ellos se reducen drásticamente.
Por ello, disponer del contenedor marrón se considera uno de los avances clave de la economía circular que se esfuerza en no desperdiciar nada. Las Directivas europeas exigen a los miembros de la UE valorizar como mínimo el 55% de la basura en 2025.
La fecha en que todos los estados miembros deben incluir la recogida separada de biorresiduos a escala local y regional es 2024, aunque el Ministerio de Transición Ecológica ha anunciado su intención de adelantar todo lo posible el despliegue de esta red en España.
Además, la Ley de Residuos y Suelos Contaminados publicada por el Gobierno de Pedro Sánchez a finales de julio quiere impulsar igualmente de forma definitiva la recogida separada de textil y aceites. En su articulado establece que las autoridades deben fomentar “la recogida separada de biorresiduos para destinarlos al compostaje o a la digestión anaerobia en particular de la fracción vegetal, los de grandes generadores y los generados en los hogares”.
“Biorresiduos recogidos separadamente”
La Ley de Residuos y Suelos Contaminados, publicada a finales de julio en el BOE, estipula que “las autoridades ambientales” deben promover “el tratamiento de biorresiduos recogidos separadamente de forma que se logre un alto grado de protección del medio ambiente llevado a cabo en instalaciones específicas sin que se produzca la mezcla con residuos mezclados a lo largo del proceso”.
A tal efecto se podrán realizar inversiones en la transformación de la Planta de Tratamiento del Monte Hacho para disponer de personal y recursos especializados, según ha detallado el director general de Medio Ambiente.
Restos de alimentos o papel usado, pero no chicles
Pocas Comunidades Autónomas cuentan ya con el contenedor marrón, con el que han sido pioneras Navarra, Cataluña o Madrid como división de los restos que en las demás terminan juntos en los grises. Lo que deberá depositarse en los marrones es restos de alimentos como pieles de frutas, espinas de pescado, plantas, cascaras de huevo o posos; o servilletas y papel de cocina usados.
Los restos impropios a este contenedor son los no orgánicos como objetos de cerámica, pañales, colillas, chicles, toallitas húmedas, arena para mascotas, pelo, polvo, etcétera.
Con los restos que se depositan en el contenedor marrón se puede hacer compost, biorresiduo que puede aprovecharse como fertilizante e incluso como generador de energía.
Los primeros fueron instalados en 17 zonas de 10 distritos de la capital, pero con intención de ampliarlo paulatinamente al resto de España. Es una línea de actuación, según Ecoembes, “hecha a medida para el cuidado del medioambiente que a la vez crea empleo”.
La utilización y valorización de los residuos de los ceutíes es un campo sin explorar por el que se han interesado vivamente tanto el Grupo Urbaser, a través de Ecoceuta, con su propuesta de planta en el puerto, como Makerel en la zona de Piniers.
Pienso yo: Que ese dinero, se tenia que gastar en concienciar a las personas, a ser menos puercos.
Ya lo que faltaba con lo bien que vamos y con lo bien que funciona nuestra ya a poner contenedores marrónes habéis hecho todo habéis acabado las obras ya esto es lo que os faltaba si es que vais al revés parece el planeta de los simions
No está mal, pero mejor sería gastarse el dinero en soterrar contenedores.
Un gasto de dinero tonto, pq si a dia d hoy apenas se recicla, ya q la mayoria tira todo al mismo lado y ya sin mencionar los escrementos q la mayoria dejan tirados x la calle...
Esto va a ser un auténtico desastre.
En una ciudad donde no se respeta el horario para tirar la basura, la policía es incapaz de poner una multa por desgana, se arroja cualquier cosa (muebles, escombros, etc) a lado de contenedor, no hay contenedores de reciclaje o están súper alejados, gran parte de la población no es capaz de tirar las cosas a una papelera ( que por otro parte escasean).
Vamos a introducir un nuevo contenedor 👏.
Cuando los empiecen a quemar, por favor que nadie se sorprenda.
Por fin se han dado cuenta de la obligación de valorizar los residuos .
Por eso no se entiende los políticos que se oponen a iniciativas de este tipo, quizás tengan otros intereses .
Incluir los contenedores NARANJA de aceite vegetal inexistentes en Ceuta .