El director gerente de la consultora Buchanan, Enrique Huertas, ha presentado este lunes en la Biblioteca Pública Adolfo Suárez la primera parte del plan de diagnóstico de movilidad en Ceuta, cuya principal conclusión es que hay un uso del vehículo privado “excesivo” para una ciudad que tendría fácil los desplazamientos a pie, “porque las distancias lo permitirían”.
De la misma forma, en esta jornada organizada en colaboración con la Sociedad para el Desarrollo de Ceuta (Procesa), Huertas ha indicado que el autobús no se usa tanto como se debería porque, según ha dicho, no representa una alternativa real al automóvil, que ofrece tiempos de viaje más reducidos, menores costes de desplazamiento y facilidad para encontrar aparcamiento. Todo ello, ha redundado, “facilita que se utilice mucho más”. “Y ahí hay mucho que hacer, porque, para una ciudad del tamaño de Ceuta, el transporte público debería desempeñar un papel más significativo”, ha proseguido el experto.
Según se reconoce en el texto, hay una falta de planificación integrada de los distintos sectores de la movilidad, y eso lleva a unos desajustes y desequilibrios que precisamente el plan de movilidad intenta poner de relieve. En este sentido, Huertas ha reiterado algo reconocido por la Unión Europea (UE): que “hay un sobreuso del vehículo privado para muchos de los desplazamientos que podrían hacerse caminando o en transporte público”.
Este hecho ocasiona inconvenientes, como el aumento del consumo energético y de las emisiones de gases contaminantes, con todas las consecuencias que ello conlleva, desde la ocupación del espacio en la vía pública a la salud, tanto física como mental, de las personas.
Por lo tanto, lo que se pretende con el plan es, una vez hecho el diagnóstico, proponer estrategias que sean capaces de revertir esa tendencia. Para ello, ha subrayado Huertas, es necesario hacer “lo suficientemente atractivo” el transporte público, que a día de hoy “no lo es”. Así, el directivo de la consultora ha propuesto que tenga unas frecuencias adecuadas y que el nivel del servicio, la calidad del vehículo y la fiabilidad que representa permitan considerarlo como una alternativa real. Tener que esperar 20 minutos o ni siquiera saber cuándo va a llegar el autobús, porque no hay información en tiempo real sobre la situación, esa incertidumbre es lo que hace que el transporte público sea “muy poco atractivo”, ha explicado Huertas, para quien “cambiar esa dinámica es clave para propiciar ese mayor uso”.
Así, Huertas ha recalcado que, para una ciudad del tamaño de Ceuta, el transporte público “no tiene el uso que normalmente se esperaría”, por lo que es en este punto y en la movilidad peatonal donde ve mayor margen de mejora.
El experto ha considerado, no obstante, que, para conseguir todo esto, el papel de la ciudadanía es fundamental, porque será ella quien determine si las medidas contenidas en el plan “son lo suficientemente exigentes y reales al mismo tiempo”. En este sentido, Huertas ha resaltado la importancia de concienciar a la sociedad, especialmente a los niños.
Huertas ha estado acompañado por uno de los técnicos redactores del proyecto, José Luis Zaballos, y por Carmen González, de la Consejería de Medio Ambiente.
Debate sobre el taxi
Tras la conferencia exponiendo el plan ha habido un debate en el que varios taxistas han preguntado acerca del papel de este servicio. La respuesta de Huertas ha sido que está recogido en el plan, pero no como un vehículo de movilidad cotidiana, como ir al trabajo, para lo cual habría que usar el transporte colectivo.
Igualmente, durante el debate se ha hablado de las bicicletas y patinetes eléctricos y de la necesidad de establecer más puntos de recarga y carriles bici. Al respecto, González ha anunciado que está pensado instalar en Ceuta carriles de movilidad compartida con algunos puntos de preferencia para los ciclistas.
Una vez concluida esta primera parte del trabajo –con la posibilidad de incluir propuestas de los ciudadanos durante los próximos 15 días-, será el momento de proponer las estrategias adecuadas para adaptarse a los cambios que propone el plan. Según ha calculado Huertas, esta segunda parte debería de estar terminada alrededor del mes de mayo.
Gilipolleces un carril bici y más educación vial, que podamos desplazarnos con más seguridad por la ciudad
tonterías y más tonterías.
Hay que la hacer cosas para que parezca que se trabaja.