El
Gobierno de Ceuta dará la próxima semana un paso clave para la construcción del
futuro Mercado de Terrones con la licitación de la construcción del equipamiento al que se trasladarán los concesionarios ubicados en el actual temporalmente mientras se ejecutan las obras del inmueble definitivo, que se presenta como un “hito” para “impulsar la actividad en la barriada”, según fuentes del Ejecutivo local. El objetivo es que los trabajos, con un plazo de ejecución de cuatro meses, arranquen “durante el último trimestre de este año”. “Por supuesto, se va a mantener informados periódicamente a los concesionarios una vez que se conozca con mayor exactitud la fecha de comienzo de la obra”, adelantaron ayer desde el Gobierno de
Vivas. La Consejería de
Comercio que encabeza Nicola Cecchi y la empresa municipal
Procesa llevan las riendas de un proyecto que absorberá 2,5 de los 3,8 millones que ha recibido la administración local a través del Ministerio de Industria del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, en concreto de la línea de ayudas para impulsar la competitividad del sector comercial. El proyecto aprobado fue redactado por
Tragsa y actualmente está pendiente de supervisión de la Consejería de Fomento como paso previo al inicio del expediente administrativo de licitación. Apuesta por una apertura del espacio “integrando nuevas zonas libres”, así como por poner en valor el conjunto de locales, algo que “les aportará mayor visibilidad, permitiendo, además, un cambio en el paradigma del tipo de negocio”.
Así, los establecimientos del Mercado de Terrones “pasarán de tener la clásica concepción como locales dentro de un recinto cerrado y controlado frente a un nuevo comercio a pie de calle”. El objetivo es, por tanto, “poner en valor la actividad comercial en sí y la integración con los espacios libres del entorno”. Por un lado se dispondrá de áreas libres de estancia y de paso “que facilitarán la circulación e integrarán el conjunto dentro de la red de espacios libres del entorno”. Por otro, los usos económicos contemplarán tanto comercio como establecimientos de restauración.
Cubierta
Además, los espacios libres que conformarán la cubierta de los nuevos locales comerciales incluirán otras dependencias para la estancia y áreas de juegos de niños. El proyecto contempla una superficie total superior a los 2.800 metros cuadrados como nuevo pilar de la apuesta por constituir “espacios públicos con accesibilidad universal, modernos y dinámicos totalmente acondicionados tanto en infraestructuras como equipamientos para la creación de un entorno atractivo y sugestivo que permita incrementar el volumen de actividad y proporcionar una experiencia de compra confortable a los consumidores y visitantes”.
El portavoz del Gobierno de la Ciudad, Alejandro Ramírez, señaló ayer que todas las obras están financiadas con fondos europeos y que dejarán como resultado definitivo un nuevo inmueble que será “un elemento fundamental para dinamizar y potenciar el entorno”. Hasta que comiencen las obras del proyecto final sobre el emplazamiento del mercado actual, se levantará y utilizará otro en la misma zona. En suelo público, sobre el anfiteatro que existe junto a las Murallas Merinidas en El Mixto, se acondicionará una infraestructura temporal a dos alturas que contará con dos entradas y en la que el consejero supone que los establecimientos actualmente operativos podrán mantener sus horarios actuales. El traslado está respaldado por informes de Patrimonio Cultural y, de hecho, incluirá según Ramírez actuaciones específicas para evitar cualquier tipo de afección al Bien de Interés Cultural (BIC) medieval.