Rosario Ramos, más conocida como Charo, fue diagnosticada de párkinson hace ya tres años aproximadamente, aunque tardaron en darle el resultado final, tal y como ella misma ha contado a El Faro de Ceuta. Es un ejemplo de que esta enfermedad no te impide seguir con tu día a día a base de lucha.
“Lo mío ha sido un poquito duro porque me estaba tratando por la Seguridad Social y no acertaron mucho conmigo. Me decían que era párkinson, que no era… cada vez que iba había un neurólogo nuevo y el neurólogo jefe dijo que si fuera párkinson yo ya estaría en una sillita de ruedas”, cuenta Charo.
Después de muchas idas y venidas, finalmente consiguió que le hicieran una prueba en Algeciras y salió que era la enfermedad de Párkinson, aunque el neurólogo seguía negándolo. Finalmente, “me mandaron una medicación que me sentó muy mal y caí en depresión”.
Esto le hizo decir que no podía seguir así y buscó otra solución. “Me hice de Sanitas y me fui a los neurólogos de Sevilla, que son de los mejores, y estoy encantada”, expresa con alegría.
Desde entonces, se encuentra en tratamiento y su situación ha mejorado. Esto también se lo debe a la asociación ADEN, a quien le está muy agradecida y a la que llegó gracias a unas recomendaciones que unos amigos le hicieron su hijo.
Tanto es así, que asegura que “la asociación me ha ayudado muchísimo, hacemos muchas actividades, vamos tres veces en semana a la piscina, tenemos psicóloga, terapeuta, talleres de costura, de lectura y algunas más. Somos una gran familia, nos apoyamos mucho”.
Además, sostiene que “me ha cambiado la vida en alegría, en ilusiones, en ganas de vivir… Mi vida ha dado un giro que no os podéis imaginar”. Esto ha hecho que su lema sea que hay que ir “siempre para adelante, para atrás ni para coger impulso”.
Por todo ello, Charo en estos momentos hace su día a día como cualquier otra persona. Recoge a sus nietos del colegio, hace labores de casa y participa en los talleres de la asociación, aunque tampoco le falta su café en la Plaza de Correos. “Yo tengo una vida plena y perfecta”, agrega.
Ahora mismo su enfermedad no le paralizada su rutina. “Yo antes no me podía abrochar los botones y ya puedo. Me impide algunas cosas sin mayor importancia” y todo ello gracias también a “las actividades que estoy haciendo aquí, que me están ayudando mucho en el día a día. Están haciendo una labor extraordinaria y eso lo debe saber Ceuta”.
Charo también quiere destacar que no hay que tener miedo. “Mi hija me decía ‘¿si te diagnostican de párkinson te vas a asustar’? y yo le decía que no. Para adelante, iremos al neurólogo, me pondrá un tratamiento y para adelante. Me ha tocado a mí como me podía haber tocado otra cosa”.
Además, esta ceutí no ha dudado en mandar un mensaje a todas las personas que se encuentren en su misma situación: “Que se animen, que busquen asociaciones, que aquí estamos muy bien, nos cuidan muchísimo y somos una gran familia”. Y lo más importante, que no olviden “que eres independiente”.
Charo, eres una luchadora
Felicidades por tu fe en salir hacia delante
Cuidate