La consejera de Hacienda del
Gobierno de Ceuta, Kissy Chandiramani, ha defendido este lunes en el
Pleno la gestión que la Ciudad en general y
Procesa en particular han hecho hasta ahora del
Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) desplegado en España para aprovechar la ingente inyección económica que recibirá el país de la
Unión Europea. Así lo ha hecho a la luz de los reparos, pero también elogios, que ha recogido el Tribunal de Cuentas (TCu) en su último diagnóstico sobre las medidas antifraude implementadas por las administraciones autonómicas para evitar corrupción, que según ha remarcado Chandiramani “se refiere a todas las autonomías y el Ministerio de Hacienda”. Después de que la portavoz del MDyC, Fatima Hamed, cuestionase la gestión realizada por la Ciudad Autónoma en comparación, sobre todo, con Melilla, la miembro del Ejecutivo local ha rechazado la visión “sesgada” que a su juicio hace la localista del dictamen. “En Ceuta sin incrementar los recursos humanos [el TCu sí habla de la incorporación de 16 efectivos] y desde Procesa hemos puesto en marcha todos los
proyectos del programa ‘Siguiente Generación”, ha valorado Chandiramani el trabajo de la sociedad municipal. “Es evidente que nos han señalado cosas que no se han hecho de manera deseada y correcta y que ustedes deberían tomar nota para que esas deficiencias no vuelvan a ser recogidas”, ha insistido Hamed. De acuerdo con el órgano de fiscalización, el Gobierno de Ceuta no ha aprovechado su capacidad de autoorganización para adaptarse a las “especialidades” de la gestión del PRTR. Tampoco ha aprobado un instrumento de planificación estratégica de nivel general ni ha realizado una planificación específica para el desarrollo de los proyectos. “Tanto Ceuta como Melilla han realizado actuaciones para garantizar, de forma coordinada, la introducción de los principios de gestión del PRTR en los procedimientos de sus instrumentos de gestión (subvenciones, contratos y convenios)”, admite el informe, que alaba el refuerzo del “control interno” implementado por la Ciudad, así como la elaboración de una guía para “homogeneizar documentos y procedimientos”. Sin embargo, la administración local “no ha establecido estructuras específicas de gobernanza, ni ha formalizado la atribución de funciones en esta materia a las unidades ya existentes”. Igualmente “no ha realizado modificaciones en sus sistemas de información dirigidas a cumplir con las necesidades del PRTR, ni tiene previsto la contratación de un software específico a esos efectos”.