Flores blancas en su memoria para recordar aquel fatídico 12 de julio de 1997 cuando toda España se movilizó para pedir a ETA que no cumpliera su amenaza de acabar con la vida del joven de 29 años.
No fue así y los terroristas cumplieron su amenaza, generando una corriente ciudadana de lucha contra el terrorismo: el Espíritu de Ermua. “Miguel Ángel Blanco es un símbolo de Libertad. Despertó nuestra conciencia, nos hizo comprender que la libertad hay que conquistarla, cuidarla y defenderla cada día ante quienes quieren arrebatárnosla y destruir la convivencia libre y la pluralidad ideológica, así como aniquilar los derechos éticos y políticos que tanto nos han costado conseguir”.
Así rezaba el manifiesto que la Fundación Miguel Ángel Blanco ha remitido a todas las localidades donde ayer se le rindió homenaje y que en nuestra ciudad fue leído por Omar Wahid, miembro de la ejecutiva de Nuevas Generaciones.
Por su parte, el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, aludió a que “recordar a Miguel Ángel Blanco es recordar que España consiguió vencer a ETA”.
La Plaza de la Constitución se ha convertido durante unos minutos en el rechazo de toda una sociedad a la barbarie terrorista.