Los representantes de las dos asociaciones de taxis de Ceuta se reunieron esta semana con la técnico medioambiental Carmen González y con el asesor de la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, Carlos González Chacón, para realizar propuestas y recibir información sobre el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS). Según desveló el presidente de la Asociación Unificada del Taxi de Ceuta, Hutman Jotar, se les prometió en estos encuentros que el año que viene la Ciudad lanzará unas ayudas para que el taxista que lo desee pueda cambiar su coche a eléctrico o híbrido, dentro del objetivo que es, con el tiempo, incluir a toda la flota.
Debido a la normativa europea que exige bajar el nivel de contaminación y CO2 a las ciudades de más de 50.000 habitantes, González está hablando con las empresas relacionadas con la movilidad para realizar dicho cambio, y entre ellas están las de los taxis. Por el momento, se desconoce la cuantía de la ayuda, puesto que el Plan aún no se ha redactado, aunque Jotar indicó que les aseguraron que seguirá habiendo reuniones para tratar las novedades cuando las haya.
Según Jotar, la Ciudad pretende instalar una oficina de información, tanto para taxistas como para el resto de ciudadanos, para detallar cómo cambiar de coche diésel a eléctrico. Así, en la oficina se proporcionarán datos acerca de los distintos vehículos, así como su precio y kilometraje, y de los puestos de carga.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Trabajadores Asalariados del Taxi de Ceuta (A.T.A.T.), Francisco Manuel Toledo, lamentó que la Administración va “muy lenta”, pero, al menos, dijo, le habían asegurado que no van a venir a Ceuta las cuatro VTC que tenían prevista su llegada a la ciudad autónoma.
Toledo también estuvo debatiendo con los técnicos sobre los vehículos que -descontando la Operación del Paso del Estrecho (OPE)- permanecen en Ceuta tan sólo un día. En su opinión, “hay que evitarlo, porque la ciudad se colapsa de vehículos”. Para ello, opinó, nada mejor que encarecer el precio.
El representante de los taxistas asalariados, quien aseguró que nada tienen en contra de los patinetes eléctricos ni de que se aumente el número de líneas del servicio de autobús, pidió también que concedan subvencionen a los propietarios para adquirir vehículos de una gama más alta, lo cual, en su opinión, redundaría en el beneficio de propietarios, trabajadores y ciudadanos.
Igualmente, Toledo solicitó “unas paradas más bonitas, con asientos y marquesinas”, y dotadas de una mayor accesibilidad, por ejemplo, rebajando la acera donde se colocan las dos primeras plazas del taxi para que la gente mayor no tenga que realizar el esfuerzo de bajar de nivel los pies. Por último, Toledo aseguró que había pedido la presencia de agentes de Policía Local en el paso de cebra del puente de Cristo cuando llegan barcos turísticos a la ciudad. Ello es así porque, según dijo, el puente es la única salida y esta semana, por ejemplo, las colas llegaban hasta el Varadero.
Mientras tanto, González confirmó que están recabando información para el PMUS por parte de todos los sectores implicados en la movilidad y entre ellos se encuentran los taxistas, de quienes se pretende conocer “a qué modelo de servicio público aspiran en el futuro”. La técnico medioambiental reconoció que una de las cuestiones que interesa más a todos los actores del Plan son los vehículos eléctricos, sobre lo cual seguirán trabajando.
Igualmente, González invitó a la ciudadanía a participar con ellos en materia de movilidad a través de la página web que se ha creado al efecto, como es pmusceuta.com, en la cual se pueden enviar correos electrónicos y completar encuestas o proporcionar opiniones. Ello -aseguró- ayudará a conseguir “un documento de calidad que refleje la realidad de la ciudad”.
La técnico medioambiental indicó que, una vez estén realizadas todas las propuestas de los sectores implicados, se hará un análisis técnico desde distintas áreas y de ahí saldrá el Plan, que tendrá un capítulo específico para el servicio público del taxi. Allí habrá medidas en un plan de acción a corto, medio y largo plazo -dos, cinco y diez años, respectivamente-.
“Habrá algunas para las que probablemente ni siquiera haga falta esperar a que se apruebe el Plan, mientras que otras sí que requerirán de un cierto desarrollo”, puntualizó González.
El PMUS, cuya aprobación está prevista en junio, tendrá una fase de consulta y 15 días de exposición en los que se volverá a recabar la opinión sobre el documento, sujeto a modificaciones tras ese proceso de participación y de consulta.
González Chacón indicó que, desde la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, se está buscando un “encaje jurídico” para proporcionar las ayudas que los asalariados reclaman para el año pasado para cubrir las pérdidas ocasionadas por el covid. Chacón dijo que, de momento, no las encuentran, porque las que se concedieron en 2021 para paliar lo perdido en 2020 fueron fruto de un plan especial por el covid que ya no existe. Por ello, dijo, están intentando conceder esas ayudas de forma directa a los propietarios. Sin embargo, Toledo no se conforma y avisó de que, si no acaban llegando, una vez que termine el Ramadán, “desde la asociación se tomarán medidas y se organizarán concentraciones”. “Si no encuentran una fórmula, que contraten una empresa externa que la busque”, propuso el representante de los taxistas.
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