Los miembros de la célula yihadista desmantelada hace unos días en Marruecos reclutaban presuntamente adeptos para luchar en Afganistán junto al Daesh (Estado Islámico) y habían confeccionado una lista de objetivos compuesta por instalaciones militares y de seguridad marroquíes, así como de personas a las que planeaban asesinar.
La célula, que según informaron fuentes de seguridad estaba localizada en la ciudad de Errachidia, en el sureste del país, se desarticuló el pasado 14 de septiembre, cuando la Policía marroquí detuvo a tres de sus miembros sospechosos de reclutar adeptos y enaltecer los actos de la rama del Estado Islámico en Afganistán.
En un comunicado enviado hoy, la Oficina Central de Investigaciones Judiciales, que depende de los servicios de inteligencia marroquíes, informa de que tras tomarles declaración y avanzar en la investigación, las fuerzas de seguridad detuvieron el pasado jueves, este lunes y hoy a cuatro presuntos miembros más.
La Oficina explica que, tras prestar juramento al emir del Daesh, los detenidos habían incluso puesto nombre a su célula, que denominaron Grupo de Monoteísmo Islámico de Marruecos, y habían empezado a reclutar adeptos para viajar a Afganistán.
El grupo, añade, había mostrado su apoyo a los atentados que llevó a cabo el Daesh en el aeropuerto de Kabul durante la operación de evacuación de Afganistán tras la llegada al poder de los talibanes.
Los presuntos yihadistas se preparaban, dice la nota, para perpetrar atentados terroristas en Marruecos y tenían señalados como objetivos instalaciones de seguridad, así como una lista de funcionarios de los ámbitos de seguridad y militares y de otras Administraciones Públicas.
Lobos solitarios y envenenamientos
Pretendían matar a estas personas mediante lo que los servicios de inteligencia denominan el terrorismo individual, es decir, usando a lobos solitarios que se disponían a hacerlo a través del envenenamiento entre otros métodos.
Los siete arrestados, indica la nota, están en prisión preventiva y de su investigación se encarga la Fiscalía especializada en asuntos de terrorismo y extremismo.