El Gobierno de Ceuta formalizó ayer la compra de la parcela en la que se levantará la nueva capilla de la Virgen del Carmen, un terreno que era propiedad del Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (INVIED). La Ciudad ha desembolsado casi 155.000 euros por 3.466 metros cuadrados en los que, además de levantar la iglesia que reemplazará a la de La Almadraba, se ejecutará una actuación más amplia de recuperación medioambiental y esparcimiento.
Hace ya más de dos años que la Ciudad Autónoma ordenó el cierre del templo debido a su estado ruinoso. Una vez más, los trámites administrativos y burocráticos para conseguir la parcela, aunque fuese de titularidad pública y careciera de uso alguno, han sido más largos de lo deseable.
El Gobierno de la Ciudad recibió en febrero el proyecto del nuevo templo, que tampoco estará listo para el próximo mes de julio, aunque todavía no se ha descartado que sí pudiera estarlo para el 1 de noviembre, una fecha emblemática en la que se celebró en 1940 la primera Eucaristía en su interior.
Todas las partes implicadas en el inicio y ejecución de las obras deben ponerse manos a la obra para que la Demarcación de Carreteras, dependiente de la Administración General del Estado, tramite cuanto antes su autorización si no hay pegas.
A partir de ahí, el Ejecutivo debe velar para que Tragsa realice el trabajo que se le ha encomendado en los plazos estipulados y no decepcionar de nuevo a una feligresía que ha recibido con estoicismo cada explicación que se le ha dado sobre la falta de realización del proyecto de sustitución de la antigua ermita.