"Todos los hombres se quieren ir de Marruecos, todos al agua". Hablan los vecinos de Larbi Krekesh, el hombre, de 38 años, cuyo cadáver fue encontrado este domingo en la playa vecina de Castillejos tras perecer ahogado en su intento de cruzar a Ceuta. Ha sido enterrado esta tarde de lunes por sus familiares y amigos. Vivía con su esposa y una hija pequeña en una vivienda del barrio de la Condesa, cuyas puertas permanecían ayer noche cerradas. Estaba trabajando en un local de alimentación, pero la ruina económica que atraviesan los vecinos de la vecina localidad marroquí les llevan a no hallar más remedio que arrojarse al mar en su propósito de llegar a la ciudad autónoma erigida en su salvación. Una salvación que a veces significa muerte, porque ya son varios los que o bien han sido encontrados muertos o bien han desaparecido. El cuerpo de este vecino de Castillejos fue encontrado en el arenal en el momento en que decenas de jóvenes, de niños y de adultos se arrojaban al mar en oleadas marcadas por la tensión. Los últimos datos de llegadas conocidos en la noche del domingo elevaban a 106 los llegados a Ceuta en torno a las once y media de la noche, queda por conocer los que hayan entrado con posterioridad, en un hecho sin comparación con otros anteriores acontecidos en la Frontera Sur.
Según han informado los amigos de Larbi, este entró en Ceuta antes de que la frontera cerrara y se quedó atrapado en nuestra ciudad. Trabajaba de camarero en las bodas. Después de tiempo esperando sin que el Tarajal abriera, cruzó a nado a Marruecos pudiendo volver a su ciudad con su familia. Pero allí pasaron los meses y no encontraba nada para mantener a los suyos, lo que le llevó a arrojarse al agua aprovechando la nula vigilancia este pasado domingo. Salió vestido y se arrojó con lo puesto al mar, muriendo ahogado.
La situación en el norte de Marruecos es de absoluta desesperación. No hay ayudas a pesar de las noticias oficiales que se difunden y que apuntan a programas de contratación laboral para los residentes que antes hallaban en la frontera o en el cruce a Ceuta su modo de vida. No hay nada, por eso los varones, sobre todo, son los que se arrojan al mar para pasar a la ciudad e intentar mantener así a sus familias. Así sucedió el sábado pero sobre todo el domingo, aprovechando la absoluta falta de control y vigilancia de los agentes marroquíes que dejaban partir a jóvenes y no tan jóvenes delante de sus miradas, arrojándose al mar con la propia vestimenta o retirándosela delante de ellos.
Este vecino de Castillejos es el primer identificado de entre los al menos dos muertos más que se habrían producido ayer. Su cuerpo fue retirado de la playa próxima a Ceuta, informándose a sus familiares directos de lo acontecido. Se sigue buscando a menores de edad y a jóvenes que se arrojaron al mar y cuyos cuerpos no se han encontrado todavía.
Claro que tiene que ver, el tiempo que pierden rezando y haciéndose el buen musulman, que li aproveche Iara estudiar, al final todo es un patio e y lo saben.
Ahora se lamentan y llora mientra se tiran en avalanchas al mar y sus familiares mirando como lo hacen, asi mira su rey a sus ciudadanos para eso no se manifiestan pero si para rezar
Para eso valdrias para enderezar bananas con el culo,menudo comentario que tendrá que ver el ir a rezar Sr.mongolo
Es verdad que no tiene que ver lo de rezar pero si protestaran allí contra sus gobernantes la mitad que protestan aquí otro gallo cantaría